Pero, según su promesa, esperamos un cielo nuevo y una tierra nueva, en los que habite la justicia. 2 Pedro 3:13 Señor nuestro Dios, Padre amado, que reunidos estemos en tu luz. Por medio de tu Espíritu, fortalece nuestros corazones para aferrarnos a ti, porque permaneces como nuestra ayuda, nuestro consejo y nuestro consuelo durante toda nuestra vida y por toda la eternidad. Envíanos a Cristo Jesús, el Salvador del mundo, y concede que una y otra vez podamos encontrar novedad de vida por medio de él. Concede que nos concentremos en él, quien ha resucitado de entre los muertos y ha de venir otra vez para completar la obra que comenzó en su vida en la tierra. Oh Señor Dios, recordamos tu promesa y permanecemos contigo. Tenemos poca fuerza, y así como estamos no puedes lograr nada a través de nosotros. Solo tú puedes cumplir tu promesa por medio de Cristo Jesús, a quien enviarás para terminar tu obra con su llegada final. Amén. Artículos recientes de Plough Daylan Woodall La asesina que canta en nuestro coro La historia oculta de violencia en mi aldea natal ha dejado heridas que solo la justicia divina puede curar. Leer Andrew Davison ¿Qué es sobrenatural? Qué tienen en común las lombrices, los humanos y los ángeles. Leer