Un proyecto de investigación sobre cáncer de mama metastásico impulsado por profesionales del Hospital Universitario Virgen Macarena y del Centro Andaluz de Biología Molecular y Medicina Regenerativa de Sevilla (Cabimer) ha recibido una donación de 100.000 euros procedente de la gala benéfica organizada en octubre por la Fundación María Jesús Vera y el Grupo ABU. El acto de entrega de la donación ha contado con la presencia de la recién nombrada delegada territorial de Sanidad, Presidencia y Emergencias, Silvia Pozo. El proyecto de investigación persigue determinar el papel de las células mieloides supresoras en el cáncer de mama metastásico y analizar su mecanismo molecular con el objetivo de desarrollar nuevas estrategias terapéuticas inmunológicas que mejoren el pronóstico y la calidad de vida de las pacientes, explica el centro hospitalario en una nota de prensa. El cáncer de mama es la primera causa de muerte en mujeres a nivel mundial. Gracias a los avances en detección precoz y tratamientos, las tasas de supervivencia han mejorado significativamente cuando el diagnóstico se realiza en etapas tempranas. Sin embargo, el pronóstico empeora de manera drástica en fases avanzadas. Cuando el cáncer alcanza un estadio metastásico, la tasa de supervivencia a cinco años cae al 32% y los tratamientos actuales solo logran controlar temporalmente la enfermedad, sin ofrecer una cura definitiva. En esta etapa crítica de la enfermedad, el tumor ha adquirido la capacidad de evadir al sistema inmunológico, lo que le permite sobrevivir, diseminarse y resistir a los tratamientos convencionales. Una de las piezas clave en este proceso es una población de células inmunológicas llamadas células mieloides supresoras (MDSC). Estas células, que en condiciones normales pueden ser protectoras regulando la inflamación, son utilizadas por el tumor para silenciar la respuesta inmunitaria y promover su expansión. Investigaciones previas desarrolladas por profesionales de Oncología Médica en colaboración con el Servicio de Bioquímica Clínica del Hospital Virgen Macarena han demostrado que las pacientes con cáncer de mama avanzado o metastásico presentan altos niveles en sangre periférica de células supresoras de origen mieloide (MDSC) y de linfocitos T reguladores (Treg) en comparación con población de mujeres sanas, sin patología oncológica. Este hallazgo ha puesto de manifiesto el estado de inmunosupresión que caracteriza a estas pacientes. La información obtenida a partir de la investigación 'Caracterización multiómica de las células supresoras de origen mieloide en cáncer de mama avanzado' permitirá generar biomarcadores que ayuden a estratificar a las pacientes según sus niveles y tipos funcionales de células mieloides supresoras y predecir su respuesta a los tratamientos. A partir de esta información, se podrá abrir la puerta a un enfoque más personalizado, en el que las pacientes puedan recibir terapias adaptadas a su perfil inmunológico específico. Este proyecto de investigación se construye sobre una colaboración estratégica entre dos grupos de investigación líderes en sus respectivos campos: el grupo 'Translational Research in Cancer Immunology and Immunotherapy', dirigido por el jefe de Servicio de Oncología del Hospital Virgen Macarena, Luis de la Cruz, y el grupo 'Metabolic Regulation and Signaling in Cancer', liderado por Patricia Altea en Cabimer. Ambos equipos ya trabajan conjuntamente en otras iniciativas de vanguardia, como el desarrollo de organoides derivados de pacientes para cáncer de mama, una herramienta innovadora que permite evaluar terapias en condiciones altamente representativas del entorno tumoral real. Esta colaboración ya ha demostrado su viabilidad científica, técnica y ética. Desde 2024, existe un circuito operativo de recogida de muestras tumorales respaldado por los correspondientes protocolos clínicos y de bioseguridad aprobados. Además, el grupo de Cabimer aporta una infraestructura avanzada para realizar estudios metabolómicos complejos mediante cromatografía líquida o gaseosa acoplada a espectrometría de masas, esenciales para caracterizar el metabolismo de las células tumorales e inmunosupresoras. El proyecto cuenta también con el apoyo de una red de colaboración de oncólogos, bioquímicos clínicos, patólogos y radiólogos del Hospital Virgen Macarena y el Biobanco del Sistema Sanitario Público de Andalucía. La Unidad de Oncología Médica del Hospital Virgen Macarena mantiene más de 240 ensayos clínicos activos , incluyendo líneas de inmunoterapia y terapias dirigidas en diversos tipos de cáncer, entre ellos el de mama. En los últimos años el centro sanitario ha impulsado y coordinado proyectos académicos como el ensayo clínico Pangea-Breast que buscaba identificar biomarcadores predictivos de respuesta en tejido y sangre de pacientes con cáncer de mama avanzado tratados con terapias sistémicas combinadas, así como el estudio sobre células supresoras centrado en la caracterización del sistema inmunológico en pacientes con cáncer de mama avanzado, comparando con cohortes sanas, y evaluación de cómo estos perfiles afectan el pronóstico y la respuesta al tratamiento. En el contexto de ensayos clínicos el HUVM fue máximo reclutador en España del estudio Monalessa-3 que estudió la combinación de un nuevo medicamento con terapia hormonal, logrando un aumento del 28% en supervivencia global en mujeres posmenopáusicas, y cuyos resultados fueron publicados en la revista 'New England Journal of Medicine' asentando un nuevo estándar de tratamiento en cáncer de mama avanzado.