Parto humanizado: en qué fijarse para elegir el mejor hospital para dar a luz a tu bebé

Wait 5 sec.

Cuando una pareja espera en una cuenta atrás el nacimiento de su hijo, son muchas las incognitas que se les presentan a las que necesitan dar una respuesta certera que les aporte la seguridad necesaria para tener un buen parto y saber que su hijo viene al mundo en las mejores manos. Según Ana Virseda , jefe de servicio de Ginecología del Hospital Universitario Sanitas La Zarzuela la elección del centro hospitalario debe basarse en la seguridad clínica, la calidad asistencial y el enfoque humanizado del parto. «Es fundamental valorar la disponibilidad de un equipo multidisciplinar (ginecólogos, matronas, anestesistas, pediatras), la capacidad del centro de atender sus preferencias, la posibilidad de acompañamiento continuo, las tasas de intervencionismo, la atención al parto fisiológico o, cuando existan complicaciones, la existencia de protocolos de parto respetado . También debe tenerse en cuenta las instalaciones (salas de parto integrales, UCIN, etc.) y la reputación del servicio de obstetricia y neonatología, más que la cercanía del centro». En esta misma línea, Marisa López , jefe de servicio de Pediatría de este hospital, apunta que algunas de las preguntas que los futuros padres deberían plantear al elegir un centro son aquellas que les permitan conocer el enfoque y las condiciones de la atención al parto. Recomienda informarse sobre qué tipo de partos se pueden atender en el centro. «También conviene preguntar si se permite el acompañamiento de la pareja durante todo el proceso, así como cuál es el protocolo de actuación en casos de cesárea o partos instrumentados». Aconseja que los futuros padres se informen sobre la atención que recibirá el recién nacido en el hospital elegido y si disponen de una unidad neonatal con todos los recursos necesarios para atender cualquier eventualidad, ya que esta información favorece la tranquilidad y confianza de los padres. «No deben olvidar preguntar sobre el apoyo que se brinda en el posparto inmediato y durante el inicio de la lactancia, y si el hospital respeta los planes de parto personalizados», matiza. Ambas expertas señalan que en los últimos años observan una mayor implicación de los padres durante el embarazo, el parto y la crianza. Buscan informarse, asistir a clases de preparación y participar activamente en la toma de decisiones. Entre las principales inquietudes de los futuros padres destacan, ante todo, la seguridad del bebé y de la madre durante el parto, así como el control del dolor y las posibles intervenciones médicas que puedan ser necesarias. También manifiestan preocupación por la atención que recibirán en el posparto y el acompañamiento durante la lactancia, conscientes de la importancia de esos primeros momentos tras el nacimiento. «A esto se suma -apunta Ana Virseda- el temor a lo desconocido o a que el proceso se tenga que desviar de lo planificado, una sensación que suele mezclarse con la emoción y las expectativas propias del momento. Finalmente, el equilibrio emocional y la adaptación a la nueva dinámica familiar son aspectos que generan inquietud, especialmente en padres primerizos que enfrentan un cambio profundo en su vida cotidiana». Matiza Marisa López que gracias al acceso a la información, las redes de apoyo y los cursos de preparación, los futuros padres llegan más informados y con un mayor sentido de autonomía. «Sin embargo, es importante que esa información esté bien filtrada y provenga de fuentes profesionales para evitar expectativas poco realistas. Aunque algunos padres tienen ideas muy definidas, la mayoría, solicita consejo, ya que cada parto es una experiencia nueva y, a menudo, abrumadora. Esto les lleva a confiar en el equipo profesional o a buscar orientación en familiares para sentirse más seguros en la toma de decisiones. La clave está en la flexibilidad, pues el parto puede ser impredecible . Combinar la guía profesional con una comunicación abierta, permite respetar los deseos de la madre, garantizando al mismo tiempo su seguridad y la de su hijo». Una de las cuestiones por las que más se interesa la pareja que va a tener un hijo es por saber qué es un parto humanizado. «Les explicamos -asegura Ana Virsedo- que es aquel en el que solo se interviene para corregir desviaciones de la normalidad, la madre y el bebé son el centro de atención, se respetan sus tiempos, preferencias y necesidades, y se fomenta la comunicación y el acompañamiento continuo . Este enfoque busca que el nacimiento se viva como una experiencia segura, natural y emocionalmente positiva, reduciendo intervenciones innecesarias, y favoreciendo el vínculo desde el primer instante, garantizando la seguridad de madre e hijo y el control del dolor». En esta línea, el Hospital Universitario Sanitas La Zarzuela ha sido reacreditado por la Iniciativa para la Humanización de la Asistencia al Nacimiento y la Lactancia (IHAN), impulsada por la OMS y Unicef. Este reconocimiento, que solo ostentan unos pocos hospitales en España, garantiza las mejores prácticas en atención al parto y apoyo a la lactancia materna, con medidas como el contacto piel con piel tanto en partos como en cesáreas, el acompañamiento elegido en el paritorio y la formación continua de los profesionales. La lactancia es otra de las mayores fuentes de inquietud, especialmente en madres primerizas. Surgen dudas sobre la técnica, la producción de leche o la compatibilidad con el trabajo. Por eso, la información prenatal y el apoyo posparto inmediato y el seguimiento en consulta de lactancia materna resultan esenciales para fomentar la confianza y prevenir el abandono precoz de la lactancia.