Apenas se inició su segundo mandato, Trump comenzó su cacería contra las bandas criminales, ahora calificadas como «terroristas». Al poco tiempo, más de 250 venezolanos acusados de pertenecer a la banda criminal Tren de Aragua aterrizaron en El Salvador, donde los recibieron con golpizas al bajar del avión. «Llegaron al infierno», fueron las palabras de bienvenida del director del Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot), el lugar en el que permanecerían incomunicados durante aproximadamente cuatro meses, antes de ser enviados a Venezuela como parte de un intercambio de prisioneros entre Caracas y Washington. Esposados, afeitados y en fila, los venezolanos fueron mostrados como presas peligrosas. Parecía un logro para la Administración Trump , que limpiaba las calles de la escoria... Ver Más