Es curioso lo que pasa con los caseteros (algunos) de la Feria del Caballo. Llevan meses intentando agruparse para la defensa de sus intereses después del plano ‘unilateral’ de 2025. Y han ido pasando cosas, eh, sin que en ningún momento se haya vislumbrado una mínima posición de fuerza en este colectivo, tal vez por lo heterogénea que es su propia configuración, pero no solo por eso: al final todo el mundo tiene sus propios intereses.De entrada, hay que dejar claro que los denominados caseteros tradicionales, con asociación propia, sí han conseguido una cierta equidistancia y equilibrio en su relación con la maquinaria del Ayuntamiento de Jerez. Por otra parte, hay que recordar la existencia de IU (PCE) y CCOO, que decidieron acudir a los tribunales al entender que se vulneraron sus derechos históricos en el plano de 2025. Respecto a IU, el Ayuntamiento decidió allanarse en el recurso de Los Andaluces, la caseta clásica de la formación y que la justicia les ha dado la razón con la redacción del plano… otra cosa, a efectos prácticos, es el de las consecuencias que tendrá la sentencia, ya que el gobierno municipal ha dejado claro, por activa y por pasiva, que no asume responsabilidades políticas de dicha actuación y que, incluso, de cara a la Feria 2026, no siente, en absoluto, obligado a volver al plano de 2024. El recurso de CCOO todavía no se ha fallado.[articles:344795]Desde que en marzo se diera a conocer el plano de Feria, la agitación entre los caseteros (muchos) ha sido constante. Los movimientos de ubicación hicieron que se creara una plataforma que estudio –y desestimó– acciones legales a la manera de CCOO e IU, que estuvieron en las primeras reuniones. Dicha plataforma, de alguna manera, se vio subsumida con el acercamiento de estos caseteros a Hostelería Jerez, que estuvo trabajando con el Ayuntamiento digamos que prestando más atención a la entrada en vigor de la nueva ordenanza, a que se abriera un período, digamos, de advertencia en cuanto a sanciones, que de reclamar acerca del plano. Pasó la Feria y se produjo la sorpresa: Hostelería Jerez aspiraba (legítimamente, por que no) a incluir en su asociación a todos los caseteros con los que había venido trabajando, pero finalmente decidieron seguir en solitario y tener una asociación propia e independiente: Caseteros de la Feria de Jerez, Cafeje. Se adujo oficialmente que era porque eran un grupo heterogéneo en el que no todos se dedicaban profesionalmente a la hostelería, algo que es cierto, hay peñas de amigos, de trabajo, hermandades, hosteleros (incluidas casetas-discoteca)… pero se quiso ver en dicho gesto la posibilidad de establecer un cierto, por complicado que sea, pulso con el gobierno municipal, por lo menos que se pusiera en cuestión la revisión del plano...Nada de eso hay. Cafeje, tras su asamblea de esta semana, quiere ir "de la mano" con el Ayuntamiento y recalca la valía de la interlocución obtenida, que claro, por qué no, pero sin la menor referencia a lo sucedido. ¿Qué ocurrirá si el gobierno municipal llega, de cara a la Feria 2026, a las mismas conclusiones respecto al plano que en 2025 aunque siga un camino distinto?Pues no se ve mucha masa crítica en la asociación para dar un paso adelante. De hecho, ya la pasada primavera quien pudo se buscó las papas (cabildeo, se llama) y, de hecho, aunque se habla de 18 o 20 casetas afectadas –siempre en el sentido negativo, claro está– fueron 3 o 4 sobre las que cayó todo el peso del desaguisado, por eso estaba sobre la mesa la tesis de “volvemos al plano de 2024, nos damos la mano y aquí no ha pasado nada” que el gobierno municipal, huelga decirlo, no contempla. Hablando de grupos de amigos, etc., lo que pasa en la Feria se queda en la Feria –hablamos de la relación con el Ayuntamiento, que nadie piense en modo Ibiza– pero los hosteleros tienen que lidiar todo el año con el Ayuntamiento, y eso, como diría Juan Gómez 'Juanito', hablando de lo largo que se hace un partido en el Bernabeú, puede ser ‘molto longo’: terrazas, cocina, aforo… ¿Quién revisa? Pues eso...