Nuestra protagonista llevaba más de dos décadas trabajando en Mercadona como gerente cuando, en agosto de 2023, inició una baja médica por ansiedad. Durante ese periodo, la empresa decidió contratar a un detective privado para vigilar sus actividades cotidianas.El informe resultante, que acabó siendo la base exclusiva de la carta de despido enviada en mayo de 2024, documentaba datos como que la empleada había acudido a una peluquería, realizado compras en un supermercado Lidl, salido a la calle luciendo pulseras y anillos metálicos, y usado su teléfono móvil.Estos comportamientos fueron interpretados por la cadena de supermercados como indicios de una "falta de voluntad de cuidarse" y de una prolongación injustificada de la incapacidad temporal.En concreto, Mercadona acusaba a su gerente de sufrir una hipersensibilidad respiratoria provocada por determinados agentes químicos (como níquel y cromo), y que el uso de joyas o el contacto con superficies cromadas (como los sillones de la peluquería) evidenciaban una "conducta incompatible con su proceso de curación".La reacción judicial: una defensa de los derechos fundamentalesAunque el Juzgado de lo Social nº1 de León dio inicialmente la razón a Mercadona, la empleada recurrió la decisión. El caso fue revisado por el TSJCyL, que emitió la sentencia 685/2025 y corrigió con contundencia la decisión de la empresa. En Genbeta Una mujer en Barcelona viajaba estando de baja y la despidieron. Fue improcedente: estaba recomendado para su recuperación El tribunal criticó duramente los argumentos de la empresa, subrayando que no era razonable calificar como "actividades que comprometen la curación" acciones tan cotidianas como ir un día a la peluquería, portar pulseras o hacer la compra.Asimismo, el fallo puso en evidencia la contradicción entre el diagnóstico de ansiedad que justificaba la baja médica y los argumentos centrados en patologías respiratorias que Mercadona usó como base para el despido.Lo más significativo es que el TSJCyL no solo consideró improcedente la sanción, sino que declaró el despido nulo, al entender que se había producido en un contexto represivo.Y es que nuestra protagonista había denunciado poco tiempo antes deficiencias en la prevención de riesgos laborales, por lo que el tribunal estimó que la empresa no sólo había vulnerado su derecho a la no discriminación por discapacidad, sino sobre todo a la garantía de indemnidad (es decir, el derecho a no sufrir represalias por ejercer derechos laborales).Las consecuencias para Mercadona y el precedente judicialEl TSJCyL condenó a Mercadona a readmitir a la trabajadora en su puesto y a pagarle los salarios atrasados, además de una indemnización de 7.500 euros por daños y perjuicios. Aunque la cantidad económica es mucho menor que los 88.000 euros inicialmente reclamados por la empleada, la resolución aún tiene un peso legal relevante. En Genbeta Un trabajador estaba de baja por estrés, Recursos Humanos lo llamó y él se desahogó sobre sus frustraciones laborales. Lo despidieron El fallo sienta un precedente importante en varios frentes: Límites al uso de detectives: La sentencia cuestiona la validez de las pruebas obtenidas mediante vigilancia privada cuando estas sólo documentan actividades cotidianas y no acreditan una intención clara de fraude o perjuicio a la salud. Protección frente a represalias: Se refuerza la jurisprudencia que impide a las empresas adoptar medidas disciplinarias como represalia por denuncias previas de los trabajadores. Relevancia de la salud mental: El caso invita a replantear cómo las empresas abordan las bajas por ansiedad u otros trastornos psíquicos, evitando respuestas disciplinarias desproporcionadas y respetando los derechos de quienes se encuentran en procesos de recuperación psicológica.¿Hasta dónde puede llegar el control empresarial?Este caso plantea preguntas inquietantes. ¿Puede una empresa despedir a alguien por ir a la peluquería estando de baja médica? ¿Hasta qué punto puede vigilar la vida privada de sus empleados en busca de pruebas de 'mala conducta'? ¿Cómo se protege legalmente a quienes padecen 'enfermedades invisibles' como la ansiedad?Vía | ConfilegalImagen | Marcos Merino mediante IAEn Genbeta | Le hicieron conducir 500 km en camión tras un infarto, y al llegar a España la empresa le despidió. El juez falla en su favor (function() { window._JS_MODULES = window._JS_MODULES || {}; var headElement = document.getElementsByTagName('head')[0]; if (_JS_MODULES.instagram) { var instagramScript = document.createElement('script'); instagramScript.src = 'https://platform.instagram.com/en_US/embeds.js'; instagramScript.async = true; instagramScript.defer = true; headElement.appendChild(instagramScript); } })(); - La noticia Una empleada de Mercadona fue despedida por cortarse el pelo y usar pulseras durante su baja por ansiedad. La sentencia sienta precedente fue publicada originalmente en Genbeta por Marcos Merino .