Morena va 3-0 en la Comisión Permanente y la oposición ni el balón huele. Por más que intentan meter el tema de los presuntos vínculos de Adán Augusto López y Hernán Bermúdez con La Barredora, simplemente no hay forma: el oficialismo ni los voltea a ver. En cambio, el debate sobre nombramientos diplomáticos para Haití, Kenia y Líbano se volvió la excusa perfecta para otro intercambio de acusaciones que, como siempre, no llevó a nada. Mucho posicionamiento, poca sustancia. Y mientras la oposición insiste en cambiar la agenda, Morena sigue haciendo. Partido controlado. Sin despeinarse.Que siempre noSe calmaron las aguas… por ahora. Tanto Ignacio Mier como Alfonso Ramírez Cuéllar descartaron querer sustituir a Adán Augusto López o a Ricardo Monreal, quienes siguen en el ojo del huracán. Ambos negaron conspiraciones. Mier dijo que el liderazgo de Adán está firme. Ramírez Cuéllar, que apoya “absolutamente” a Monreal. Pero el mensaje ya salió de Palacio Nacional: hay banca, y los suplentes siempre están listos para calentar.¡Andaba de parranda!Después de semanas en silencio -y en medio del escándalo más tóxico para Morena en lo que va del año- Ricardo Anaya reapareció. Dijo que no andaba en Tokio ni en Europa, como ciertas figuras guindas, sino de vacaciones con su familia en Estados Unidos. Y de paso, aprovechó para exigir una investigación “tope donde tope” contra Adán Augusto y su exsecretario de Seguridad, Hernán Bermúdez. Veremos si continúa levantando la voz… o deja el asunto en paz.Les llueveCon un pie en el cuello ante la posibilidad de que la próxima reforma electoral someta a votación popular sus cargos y, por tanto, sean destituidos, a los consejeros del INE les tocó ayer regañiza, pues los magistrados electorales los acusaron de arbitrarios, por inventar criterios para evaluar el promedio de 9 para la especialidad (aunque así lo establece clarito la reforma judicial). Además, tendrán que tragarse su orgullo y llamar a los candidatos que habían destituido para darles sus constancias de mayoría. O sea que mal y de malas los consejeros electorales, que no se pueden ver ni entre ellos, mientras que en el TEPJF parecen ser muy amigos… pero del poder.Para dar y repartirAlito Moreno se lanzó con todo: denunció a medio oficialismo por presuntos nexos con el crimen organizado. Como quien reparte volantes, soltó nombres a diestra y siniestra: Adán Augusto, Mario Delgado, gobernadores, Andy López Beltrán… hasta a AMLO. Y por si la FGR le quedaba chica, anunció que llevará el show al FBI, la DEA, el Departamento de Estado y, claro, a la Corte Penal Internacional en La Haya. El líder nacional priista dice que no teme por su vida y mucho menos perder el fuero, porque ese –asegura con toda seriedad– también lo va a volver a ganar. Con esa trama, igual y termina en una serie gringa de crimen y castigo.The post Atajadas oficialistas first appeared on Ovaciones.