San Fernando alberga un helado singular en el panorama nacional: el Americano de La Valenciana Ibense, una creación exclusiva y patentada. Este producto fue ideado en la década de 1940 por José Cortes Belda, abuelo de la actual propietaria del establecimiento, y desde entonces se ha mantenido como una seña de identidad local.El nombre del helado, Americano, responde a una estrategia comercial propia de la época, cuando todo lo relacionado con América gozaba de gran popularidad entre los consumidores. Con el paso de los años, la receta original se ha conservado intacta, convirtiéndose en un emblema gastronómico de San Fernando y en una rareza dentro del sector heladero español.La historia de dos valencianosLa heladería La Valenciana Ibense abrió sus puertas en San Fernando en 1935, fundada por José Cortes Belda, natural de Ibi (Alicante), y su esposa Isabel Asensi, oriunda de Jijona, dos localidades alicantinas con una sólida tradición heladera. Cinco años después de su apertura, el negocio se trasladó al local que aún ocupa en la calle Colón. A lo largo de las décadas, la gestión del establecimiento ha pasado de generación en generación dentro de la misma familia, siendo actualmente dirigido por Maribel, nieta de los fundadores, junto a su marido Juan Manuel Fernández García.Considerada la heladería más antigua de San Fernando, La Valenciana Ibense mantiene su esencia como negocio familiar. El establecimiento cuenta con un despacho con mesas para el público y un obrador donde elaboran artesanalmente toda su producción. Entre sus sabores más demandados destacan el tuti fruti, el turrón y la vainilla. Además de sus helados, la heladería ofrece otros productos tradicionales como granizados, especialmente de limón, y horchata, bebida típica de la Comunidad Valenciana que también elaboran de forma propia. Todos los productos están disponibles tanto para consumo en el local como para llevar, manteniendo la apuesta por la elaboración artesanal que ha caracterizado al negocio desde sus inicios.