"Nos ha salido el tiro un poco por la culata". Muchos vieron en la subida de precios de Ibiza como destino turístico una oportunidad para deshacerse de un turismo de borrachera, de excesos, y que aportaba muy poco a la isla. Sin embargo, esto ha tenido otro efecto, a ojos de Miquel Tur, presidente de Pimeef Restauración: ha ahuyentado al turismo familiar, que solía venir una o dos semanas, por lo que tenía tiempo para gastar en los negocios locales, y repetía al año siguiente. Esto lo notan en sectores como el alquiler de coches y motos o la restauración.Seguir leyendo....