La Policía Nacional ha detenido este martes en Sanlúcar de Barrameda a cuatro miembros de un conocido clan familiar de las Tres Mil Viviendas de Sevilla, presuntamente implicados en un ataque con armas de fuego y un posterior secuestro ocurrido el pasado 28 de junio en la desembocadura del río Guadalquivir, en la zona de Bajo de Guía.Los hechos, según la información difundida por la Policía, se produjeron en torno a las cinco de la tarde, cuando dos motos de agua con dos individuos a bordo cada una se aproximaron a una embarcación recreativa en la que viajaban cinco personas. Sin previo aviso, los ocupantes de las motos abrieron fuego contra los tripulantes, alcanzando al menos a uno de ellos.La víctima herida se arrojó al agua para intentar salvar su vida, momento en el que fue interceptada por los agresores, que la llevaron hasta la orilla y la golpearon con violencia. El suceso se produjo en un enclave de alta afluencia turística, generando una situación de riesgo para numerosos bañistas y navegantes, y causando una notable alarma social en la localidad.Las pesquisas han sido coordinadas por la Sección Civil y de Instrucción del Tribunal de Instancia de Sanlúcar de Barrameda, en colaboración con las brigadas de Policía Judicial de Sanlúcar y de Cádiz. La investigación ha permitido identificar a los presuntos autores, vinculados a un clan con antecedentes por hechos similares, entre ellos un intento de atropello contra la misma víctima el año anterior.En Sanlúcar durante el veranoLos agentes han determinado que el grupo se había desplazado a Sanlúcar durante el verano, donde se ocultaban y almacenaban las motos acuáticas utilizadas en el ataque. En la madrugada del martes se llevaron a cabo registros simultáneos en tres domicilios relacionados con los detenidos.En el operativo, en el que participaron unidades especializadas como GOES, UPR, GOR y guías caninos, bajo la supervisión de los Letrados de la Administración de Justicia, se procedió a la detención de cuatro personas. Además, se intervinieron las dos motos de agua utilizadas en el tiroteo y unos 25.000 euros en efectivo.