El mejor panadero del mundo, o al menos, el que ha obtenido el título Panadero Mundial de 2025, José Roldán, uno de los galardones más importantes del sector a nivel global que otorga anualmente la Unión Internacional de Panaderos y Confiteros (UIBC), es el director técnico de la Panadería El Brillante de Córdoba, un obrador con más de un siglo de historia. El ganador de la última edición del premio 'UIBC World Baker of the Year' en una gala que se celebró en São Paulo (Brasil), en el marco de la feria Fipan por un jurado internacional fue distinguido por su excelencia técnica, creatividad e innovación. Unas cualidades que pone cada día al amasar en el obrador situado en la avenida de la Arruzafa, 72 . Desde 1919, La Panadería El Brillante combina tradición y vanguardia en el corazón de Córdoba, reza en su página web . «Cada pieza de pan es una historia de pasión y herencia, uniendo generaciones a través del sabor. Descubre nuestro legado, donde la innovación se encuentra con la historia en cada bocado, celebrando la riqueza de nuestra cultura», abundan en su presentación. La panadería El Brillante tiene sus orígenes ligados a la historia de Córdoba. En 1880 el abuelo de Ángel Roldan León fundó la Casa el Pisto y el Horno De la Cruz, en la célebre Plaza de San Miguel . De este original Horno De la Cruz, la familia escinde el mismo negocio en varias ramas y nace el Horno Panadería San Miguel, trasladándose a la histórica Venta Vargas, sita en avenida del Brillante número 72. Desde 1919 hasta hoy, «El Brillante es un referente en la ciudad de Córdoba. Aquí estamos, esperando p ara dar lo que mejor sabemos hacer«. El Brillante es más que un obrador, recogen en su historia dentro de la página web, »es tratar materia prima de primera calidad, es ofrecer producto tradicional e innovador, es despertar recuerdos unidos a nuestra ciudad«, cuentan desde la propia empresa a través de su web. Tanto sus panes como sus dulces que salen a diario de su horno son auténticos manjares. Desde su pan de espelta, de masa madre, a las tradicionales cocas o molletes con centeno pasando por las teleras se pueden disfrutar en su mostrador. Sus tortas de aceite y sus apestiñadas son la delicia de muchos cordobeses que llegan a este punto de la ciudad para hacerse con una de estas docenas. Y en invierno, las migas con chorizo de Espejo y ajos de Montalbán. Los monjiles, las tartas de manzana, los bizcochos, las napolitanas o las palmeras de chocolate o de yema son otras de las delicias más cotizadas de este horno. Ahora, después de una renovación total del establecimiento -que ofrece parking privado- además se pueden disfrutar sus desayunos en la terraza donde no faltan los molletes con jamón cortado o los gratinados de york y queso, como no, con el mejor pan de la mano del 'mejor panadero del mundo'.