De la Comunicación a la Nutrición Javier Zarzana Marín, jerezano de 48 años de edad, lleva casi una veintena de años dedicado a la nutrición. Es licenciado en esta materia, pese a que en un principio se inclinó en formarse en Comunicación en la rama de publicidad. Sin embargo, se volcó en el mundo de la dietética pasando consulta en varias localidades de la provincia. Afirma que la obesidad en España representa un problema que está testado con cifras alarmantes. Para Javier la clave del sobrepeso está en no saber alimentarnos y en buscar soluciones rápidas que no funcionan.Nutrición y obesidad. ¿Es un tándem inseparable?Sin duda, porque la obesidad, que hoy en día está considerada una enfermedad, suele ser consecuencia directa de una mala alimentación. Si comiéramos bien, nunca llegaríamos a ese punto. Además, la obesidad se asocia a otras patologías como la hipertensión, el colesterol alto, el aumento de triglicéridos, problemas respiratorios e incluso dolencias articulares como la artrosis o la artritis. Aunque por sí sola no siempre se considera una enfermedad, está relacionada con múltiples complicaciones de salud.¿Cuánto tiempo lleva en la profesión?Ahora mismo, más de 18 años. En realidad, comencé con una doble motivación. Por un lado, estudié Publicidad y Relaciones Públicas, un campo que me encantaba y en el que he trabajado durante mucho tiempo —y sigo haciéndolo—. Pero también me apasionaba la nutrición, así que compaginé ambas formaciones hasta que, con el tiempo, orienté mi carrera principalmente hacia la dietética.[articles:338528]Zarzana, posando para la entrevista. MANU GARCÍA"El 60% de los adultos en España sufre sobrepeso u obesidad porque hemos perdido la cultura de alimentarnos bien"¿Cualquiera puede ser nutricionista o dedicarse a poner dietas sin formación?No, en absoluto. Para dedicarse a esto hay que contar con una formación reglada. Existen dos vías: estudiar un grado universitario en Nutrición, o bien obtener una titulación como Técnico Superior en Dietética.¿Es una profesión que está en auge?Sí, y no es casual. Hay datos alarmantes que hacen que nuestra figura sea más necesaria que nunca. Tres de cada diez niños españoles son obesos, lo que significa que muchos arrastrarán ese problema durante toda su vida. En adultos, la situación también es crítica: el 60% de la población española tiene sobrepeso u obesidad, según la OMS. Estas cifras tan elevadas se deben, desde mi punto de vista, a que no sabemos alimentarnos. Vivimos en una sociedad que ha perdido el hábito de cocinar. Antes nuestras madres y abuelas cocinaban bien; hoy, entre el ritmo laboral de ambos miembros de la familia, se opta cada vez más por comida rápida o procesada.[articles:338280]¿La consecuencia es entrar en una espiral sin retorno?Totalmente. Si recurres a alimentos preparados durante un mes, puedes ganar fácilmente 10 kilos. Pero si lo haces durante varios años, el resultado es un sobrepeso severo. Ese es el gran problema que enfrentamos ahora.¿Hablar de dieta es sinónimo de pasar hambre?En absoluto. Se puede comer bien, en cantidad y sin pasar hambre. Muchos pacientes se sorprenden al ver que no sufren restricciones extremas. La clave está en elegir alimentos con poca carga calórica, porque esto al final es un juego de calorías. Todas las dietas se basan, en última instancia, en un déficit calórico. Se trata de aprender a combinar los alimentos correctos que te nutran sin sobrepasar ese límite.Javier Zarzana, en su consulta. MANU GARCÍA¿Está satisfecho con los resultados que ha conseguido en estos años?Sí. De hecho, la mejor publicidad que tenemos es el boca a boca. Vengo del mundo de la comunicación, y siempre se ha dicho que una recomendación vale más que cualquier campaña. La mayoría de nuestros pacientes llegan porque alguien se lo ha recomendado."Hoy en día queremos adelgazar con una pastilla igual que buscamos la comida ya hecha: sin esfuerzo y de forma inmediata”¿Puede contarnos algún caso llamativo de pérdida de peso?Hace unos cuatro meses tratamos a un chico que pesaba 186 kilos y que ha conseguido quedarse en 70 kilos. Fue una combinación de fuerza de voluntad, una alimentación saludable y constancia. Pero hoy en día, mucha gente quiere resultados inmediatos, como pasa con la comida preparada. Buscan bajar de peso con una pastilla o soluciones exprés, cuando lo que hace falta es una reeducación alimentaria."Muchos pacientes se sorprenden al descubrir que pueden perder peso sin pasar hambre, solo entendiendo el valor calórico de los alimentos"Sin embargo, hay pastillas que prometen resultados rápidos. ¿Qué opina?Ahora mismo hay muchas personas tomando un fármaco desarrollado originalmente para la diabetes que, como efecto secundario, provoca pérdida de peso. Han lanzado una versión específica para adelgazar, y algunos la solicitan a su médico de cabecera o endocrino. Pero aunque es una medicación legítima, se está usando de forma cuestionable. Desde mi punto de vista, solo sería recomendable si ayuda a evitar una intervención quirúrgica como una bariátrica. Si no es así, la pérdida de peso debe hacerse con dieta equilibrada, constancia y aprendizaje. Porque si no entendemos qué comemos, cuánto y cómo, volveremos siempre al mismo punto.