Una tragedia sin precedentes ha estremecido al pequeño municipio italiano de Gemona de Friuli, donde una ciudadana colombiana y su suegra confesaron haber asesinado y desmembrado a Alessandro Venier, de 35 años. El cuerpo fue arrojado, cubierto de cal viva, a un cubo basura en el sótano de la vivienda familiar.El caso, que ya está siendo investigado por la Fiscalía de Udine, ha sacudido profundamente a los habitantes del lugar. “Nunca ha habido una tragedia como esta en la historia de este municipio”, expresó consternado el alcalde Roberto Revelant.Venier vivía con su madre, Lorena Venier, y su pareja, la colombiana Marylin Castro Monsalvo, con quienes además tenía una bebé de pocos meses. La menor ya fue puesta bajo custodia de los servicios sociales tras el terrible hallazgo ocurrido el jueves 31 de julio. Según los reportes, ambas mujeres realizaron la llamada a emergencias pasadas las 10:30 a.m. y, tras sus primeras declaraciones, fueron detenidas al considerar los agentes que sus testimonios eran autoincriminatorios.[articles:339114]Hasta ahora, han admitido haber participado en el homicidio, pero no han revelado detalles sobre cómo ocurrió el crimen ni el motivo detrás del mismo. La acusación formal es por homicidio voluntario, aunque no se descarta que surjan nuevos cargos a medida que avanza la investigación. Al parecer, mataron y descuartizaron al hombre, alegando que "no ponía la mesa".El cadáver de Venier fue encontrado en el sótano de la casa familiar, dentro de un contenedor con cal viva, un intento evidente de ocultar el cuerpo. Las autoridades siguen recogiendo pruebas en la vivienda, mientras el vecindario permanece acordonado por los Carabineros para evitar filtraciones o alteraciones en la escena.La fiscal Claudia Danelon ha asegurado que ambas mujeres cumplieron roles diferentes en el crimen, aunque, por ahora, no se han divulgado más detalles para no interferir con las pesquisas. La audiencia de validación ante el juez de instrucción está programada para el viernes 1 de agosto.El crimen ha causado una fuerte conmoción entre los vecinos, quienes recuerdan a Venier como un joven que participó en los scouts y provenía de una familia muy respetada en la comunidad. La brutalidad del asesinato y la implicación directa de su pareja y su propia madre han generado una oleada de incredulidad y horror.