La desaparición de Raúl Heredia, un hombre de 41 años y padre de cuatro hijos, ha concluido este martes con el hallazgo de su cadáver en Mijas, Málaga, tras cinco días de búsqueda. La Guardia Civil desplegó un amplio dispositivo de rastreo que incluyó drones, un helicóptero, unidades caninas y buzos del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS). La investigación, aún en curso, se centra ahora en esclarecer las circunstancias que rodearon su muerte.La alarma fue activada por los familiares de Heredia después de no tener noticias suyas desde el 24 de julio. Su desaparición, de la que se hacía eco este pasado lunes la asociación SOS Desaparecidos, fue calificada como preocupante desde el inicio por las autoridades, debido a las condiciones en las que se produjo y al contexto familiar del desaparecido.Detención por otro crimen en el mismo entornoPoco después del hallazgo del cadáver, agentes de la Guardia Civil han procedido a la detención del hijo del fallecido como supuesto autor de otro asesinato, el de un vecino del barrio de Molino del Viento. La zona, ubicada en Mijas, se encuentra ahora bajo vigilancia especial mientras se desarrollan las pesquisas.Fuentes próximas a la investigación sostienen que uno de los elementos que se está considerando como móvil del crimen es una disputa relacionada con estupefacientes, lo que podría haber desencadenado una cadena de enfrentamientos violentos.El caso ha generado gran impacto en la localidad malagueña, donde vecinos y allegados han expresado su consternación ante el giro que ha tomado la desaparición. La presencia policial ha sido constante en las últimas horas, mientras los investigadores recogen pruebas y testimonios clave para reconstruir los hechos.La Guardia Civil trabaja en una doble línea de investigación. Por un lado, para aclarar las circunstancias de la muerte de Heredia y descartar o no la participación de terceras personas. Y, por el otro lado, la investigación estará centrada en conocer los motivos que han llevado a su hijo a matar a un vecino.