Un clamor por el Guadalquivir: gran alianza social desde Chipiona para frenar los vertidos de Aznalcóllar y Las Cruces

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Una concentración ciudadana ha tomado este domingo las calles de Chipiona para exigir una moratoria inmediata a los vertidos mineros en el río Guadalquivir. La protesta, respaldada por ayuntamientos y colectivos de diversa índole, ha puesto sobre la mesa una reclamación clara: detener los vertidos procedentes de las minas Cobre Las Cruces y la de Los Frailes (Aznalcóllar) y crear un comité científico independiente que analice sus consecuencias.Bajo el lema 'Salvemos el Guadalquivir', la movilización ha contado con el respaldo de los municipios de Trebujena, Coria del Río, Lebrija y la propia Chipiona, así como de organizaciones como COAG Andalucía, la Federación de Pescadores de Cádiz, FACUA, Marea Blanca, Greenpeace y Ecologistas en Acción. Un frente común que agrupa tanto a sectores sociales y económicos como medioambientales.[articles:332102]Los convocantes denuncian la amenaza ecológica y sanitaria que supondrían los vertidos en el estuario del Guadalquivir. Aseguran que los planes para descargar hasta 130.000 millones de litros de residuos mineros representan un peligro real para la biodiversidad, la calidad del agua y las actividades que dependen del río: agricultura, ganadería, pesca, acuicultura y turismo.El catedrático Jesús Castillo, en la protesta.Rafael Ruiz López, portavoz de la Plataforma Ciudadana Salvemos el Guadalquivir, ha advertido de que "nos enfrentamos a una crónica de una muerte anunciada". En declaraciones a EFE, ha alertado de que los metales pesados presentes en los vertidos podrían incorporarse a la cadena trófica, afectando desde el río en Sevilla hasta la Bahía de Cádiz. "Sería un verdadero desastre ecológico y económico", ha afirmado.Ruiz ha denunciado que el estuario ya presenta altos niveles de contaminación. "Las universidades de Sevilla, Granada y Cádiz, que forman parte de la plataforma, han comprobado que el río está actualmente colmatado de metales pesados. Si se arrojan diez veces más, sería insostenible", ha alertado.[articles:337755]Los informes científicos citados por la plataforma apuntan a que los sedimentos del estuario, especialmente entre La Algaba y el estadio de La Cartuja de Sevilla, contienen concentraciones elevadas de metales como cromo, plomo, mercurio o selenio, con efectos ecotóxicos para la fauna acuática. En concreto, se ha detectado la presencia de estos metales en especies como el albur.Las entidades convocantes alertan del riesgo de "colapso hídrico" en el estuario, lo que afectaría directamente a la biodiversidad acuática, la calidad del agua y la viabilidad de las actividades humanas que dependen del río. "Sin un Guadalquivir limpio y vivo no hay futuro para nuestras familias, nuestros cultivos ni nuestro turismo", indica el comunicado conjunto.Un ataúd en la protesta.La preocupación social e institucional ha sido recogida en mociones aprobadas por los plenos municipales de Chipiona, Sanlúcar de Barrameda, Rota y Trebujena, y fue trasladada al presidente de la Junta de Andalucía en una carta formal remitida el pasado 9 de abril y suscrita por diez ayuntamientos ribereños."Europa ha dicho que somos una zona sacrificable, y no estamos de acuerdo", ha subrayado Rafael Ruiz. "Cada vez hay más sectores implicados: agricultores, pescadores, ayuntamientos. Vamos a luchar por nuestro río porque, literalmente, se nos va la vida en ello", ha concluido.