Iberdrola ha dado un golpe de efecto aprovechando la presentación de sus resultados semestrales de este 2025. La primera energética española ha anunciado una ampliación de capital de 5.000 millones de euros, lo que viene a representar el 5% de su capitalización bursátil, que ronda los 100.000 millones, según ha anunciado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), quien posteriormente ha suspendido a la empresa de cotización una hora antes de abrirse los mercados. La empresa busca reforzar su balance para acelerar las inversiones en redes en Estados Unidos y Reino Unido tras señalar como insuficiente la nueva propuesta de retribuciones a las eléctricas que ha planteado el organismo de Competencia en España. Seguir leyendo