El interés de Florentino Pérez por Rodrigo Hernández comenzó de forma casual. Más allá de la valía futbolística del centrocampista, alguien comentó que el jugador seguía viajando recurrente desde Manchester a Castellón para acabar la carrera de Administración y Dirección de Empresas en la Universidad Jaime I y aquel detalle quedó grabado a fuego en la memoria del dirigente. A Pérez le gustó la determinación del madrileño para concluir sus estudios y desde ese momento comenzó a mirarle con otros ojos. Seguir leyendo....