Desarrollador clave en proyectos como Kubuntu y KDE neon, responsable durante un tiempo de la gestión de lanzamientos de Plasma y figura reconocida dentro de la comunidad, Jonathan Riddell ha anunciado que abandona KDE. Un paso que coincide con el final de la empresa que lo empleaba, Blue Systems, y que marca también el cierre de una etapa importante para el propio proyecto. No es nada, en todo caso que no se viese venir desde hace un tiempo.Cuenta Riddell en su blog personal que se incorporó a la comunidad KDE a principios de los 2000 y pronto comenzó a contribuir activamente durante los siguientes años. Fue más tarde uno de los principales impulsores de Kubuntu, el sabor oficial de Ubuntu con KDE, proyecto que lideró cerca de una década no exenta de polémicas. Cuando Canonical forzó su retirada, el Riddell continuó su camino de la mano de Blue Systems, empresa alemana que pasó a financiar varios proyectos de KDE.De dicha colaboración surgió KDE neon, una propuesta basada en Ubuntu LTS con el software de KDE siempre actualizado, que pronto se convirtió en referencia tanto para entusiastas como para otras distribuciones derivadas, como Tuxedo OS o LliureX. Durante años, Riddell fue la cara visible del proyecto, además de coordinar lanzamientos generales del escritorio Plasma. Fue en aquella época cuando lo entrevistamos en MuyLinux.La historia reciente de Riddell no se puede separar de Blue Systems. La compañía, conocida por su apoyo económico a KDE, cesó su actividad el pasado invierno, lo que precipitó la creación de TechPaladin Software, una nueva empresa fundada por otro conocido desarrollador de KDE como es Nate Graham para continuar con parte del trabajo. Según Graham, la transición garantizaría la continuidad de KDE con «casi todas las mismas personas» que trabajaban antes en Blue Systems.Jonathan RiddellSin embargo, no todos han visto esta evolución del mismo modo. Riddell ha explicado que fue excluido de TechPaladin sin posibilidad de debatir alternativas, lo que puso fin a su carrera en KDE. Siempre de acuerdo con su versión de los hechos, la nueva compañía reproduce problemas previos en cuanto a condiciones laborales y gobernanza, algo que él trató de cuestionar no solo sin éxito, sino con un rechazo explícito.«He dado mi vida a KDE», escribe Riddell, recordando cómo vio crecer el proyecto desde sus primeras etapas hasta convertirse en uno de los escritorios más relevantes del ecosistema. «Al final he perdido a mis amigos, mis colegas, mi trabajo, mi carrera y mi familia», concluye, con un evidente y entendible desencanto personal.En definitiva, este es el esperado desenlace de una historia que cubrimos a mediados de año en torno a la continuidad de KDE neon, no solo por la situación generada por el fin de Blue Systems y el inicio de TechPaladin Software, sino por el anuncio unos meses antes de KDE Linux. Y es que no hay sitio, ni tiene sentido, fomentar el desarrollo de dos distribuciones oficiales. Ya estaba claro lo que iba a pasar, aunque se tuviese que matizar.A nuestras preguntas, Aleix Pol, presidente de KDE e.V., nos aseguró que el soporte de la KDE neon se mantendría al menos durante el ciclo actual, basado en Ubuntu 24.04 LTS, pero que el futuro pasa por proyectos más ambiciosos como KDE Linux, cuya primera versión alfa fue presentada la semana pasada. Mientras tanto, KDE neon seguirá su marcha, no sin complicaciones debido a la falta de manos.La entrada Jonathan Riddell se despide de KDE tras 25 años es original de MuyLinux