No todo es Koldo, Ábalos o Cerdán. Hay declaraciones en sede judicial sobre la pillada de un fraude fiscal de manual de Alberto Quirón, pero de unos se han escrito ríos de tinta, publicado desplegables y hasta emitido programas especiales. De otros, ni palabra, ni media línea, ni interrupciones en la programación habitual. Sigan la pista del dinero de la publicidad que reparte el gobierno de Ayuso y sabrán quiénes y por qué callanLa inspectora de Hacienda, ante la jueza sobre la pareja de Ayuso: “Como tenía muchos beneficios hizo facturas falsas” No todo es Koldo, ni Ábalos, ni Cerdán. Hay otros audios. De unos se han escrito ríos de tinta, publicado desplegables y hasta emitido programas especiales en las cadenas de televisión. De lo que forma parte de la investigación judicial y de lo que no. De lo que es objeto de materia penal y de lo que es estrictamente casquería sobre la vida personal o conyugal de los protagonistas. De otros, ni palabra, ni media línea, ni un análisis, ni una interrupción de la programación. Los segundos son los que ha publicado elDiario.es sobre la declaración de una de las inspectoras de Hacienda que inició la investigación sobre el fraude fiscal del novio de Ayuso. Alberto Quirón, para los amigos. Son dos horas y 38 minutos de declaración de la funcionaria ante el juzgado de instrucción número 19 de Madrid en los que explica con argumentos técnicos un escándalo que la presidenta de Madrid ha calificado de “operación de Estado” para acabar con ella. La inspectora relata minuciosamente en sede judicial el trabajo que realizó entre mayo de 2022 y enero de 2024, antes de que el caso lo destapara elDiario.es. Casi dos años de investigación sobre el Impuesto de Sociedades presentado por Alberto Quirón de los ejercicios 2020 y 2021 hasta que la funcionaria acabó su trabajo y remitió el expediente a la Fiscalía. No porque el mencionado estuviera en el radar del fisco por un soplo o porque Hacienda supiera con quién compartía vivienda habitual, sino porque lo defraudado superaba los 120.000 euros por año y existía dolo, es decir, intención de delinquir. No una, ni dos, ni tres, ni cuatro…. Hasta 15 facturas falsas detectó la inspección por valor de 1,7 millones de euros y que la pareja de Ayuso usó para no pagar lo que debía a Hacienda. En total, defraudó 350.910 euros. Y el motivo por el que se inician estas actuaciones inspectoras es que había un incremento muy considerable de los ingresos en el ejercicio 2020 respecto de 2019, unos 2.330.000 euros aproximadamente. Pero no, no fueron sus altísimos ingresos lo que encendieron las alarmas del fisco, sino que tras quintuplicar su facturación, descendiera la tributación de forma tan escandalosa. Los inspectores tiraron del hilo y hallaron las facturas falsas que Alberto [Quirón] González Amador negó e intentó anular contable y fiscalmente, después de la pillada de Hacienda. “Lo hace cuando le ha pillado la Agencia Tributaria, cuando ya estaba el procedimiento inspector (...) cuando las propias autoridades mexicanas [desde donde se emitió una de las facturas] están poniendo en evidencia que esa factura no responde a la realidad de los servicios, porque esos servicios no se han prestado. Es cuando quiere un poco ajustar o arreglar su situación”. Así lo cuenta la inspectora. Vamos, que el fraude era de manual, pese a que Ayuso y su séquito mediático intentaron camuflar como un “impuesto pagado fuera de plazo”, “una paralela más abierta a un particular de las miles que realiza Hacienda” o “una operación de Estado para acabar con la presidenta madrileña”. La Asamblea de Madrid celebró este jueves la primera sesión del Debate de la Región y las primeras palabras de Ayuso fueron, cómo no, para criticar al presidente del Gobierno y decir que “el sanchismo es oscuridad”. Ella, que se proyecta a diario como un ser de luz, prometió rebajas fiscales para las empresas familiares. ¿En quién estará pensando? A saber. Lo único que consta es que hay un extenso material declarativo de Ayuso sobre los infames y escandalosos audios de Koldo, Ábalos y Cerdán y la baronesa más locuaz del PP no ha dicho una palabra sobre la pillada de su pareja. Tampoco sus habituales cheerleaders mediáticos. Sigan la pista del dinero de la publicidad con la que riega Ayuso a determinados medios y sabrán quiénes y por qué callan. Los compañeros de Infolibre lo han contado con todo lujo de detalles en una investigación que han titulado Ayuso parte y reparte. El silencio tiene precio y asciende a casi 24 millones de euros solo en 2024.