Davie504 lleva algunos años siendo un 'rostro conocido' de YouTube: sus vídeos haciendo gala de virtuosismo tocando el bajo, su humor seco y sus desafíos imposibles le han convertido en un músico bastante seguido en la plataforma, cosechando más de 13,4 millones de suscriptores y cientos de millones de reproducciones. Sin embargo, a finales de septiembre, el creador italiano publicó un vídeo con un tono muy distinto, y con un título que lo explicaba todo:"YouTube va a cerrar mi canal".La causa, explicaba, no era una caída en visitas ni un escándalo por contenido polémico: eran las falsas reclamaciones de copyright. Tres strikes (sanciones graves del sistema de derechos de autor de YouTube) que podrían borrar de un plumazo más de una década de trabajo. "Hace años toqué mi versión de la Sonata 'Claro de Luna0 de Beethoven. Una pieza que es de dominio público desde hace siglos… y aun así me ha llegado una reclamación de copyright".Cuando Davie504 intentó disputar la reclamación, YouTube lo rechazó. El reclamante —una supuesta discográfica que, según él, "aparentemente posee toda la música del universo"— mantuvo la denuncia, y el canal recibió un strike. Recibir tres de ellos, recordemos, significa la eliminación inmediata del canal. Así se lamentaba el youtuber de lo que le estaba pasando:"Es increíblemente fácil para gente aleatoria o incluso bots destruir años de trabajo. Si esto me pasa a mí, imagina a los canales pequeños".El sistema de copyright de YouTube: automatizado, opaco y vulnerableYouTube permite a sellos y creadores registrar su música en una base de datos llamada Content ID, que identifica automáticamente coincidencias de audio y reclama ingresos publicitarios. En teoría, es un sistema que protege a los autores... en la práctica, miles de vídeos son reclamados —o directamente bloqueados— por errores o abusos.Davie504 lo resume con ironía:"No tengo problema cuando la reclamación es legítima. Pero estas son falsas. A veces son errores del sistema; otras, gente que intenta quedarse con tus ingresos".Pero lo peor es que no es el único. En los últimos meses, otros creadores del ámbito musical, como Rick Beato y 'Professor of Rock', han denunciado casos similares. En Genbeta Ya no son solo 'strikes' de YouTube: un youtuber afronta una posible pena de cárcel por analizar consolas retro con juegos Rick Beato: "Universal Music Group está intentando silenciarme"El productor y divulgador musical Rick Beato, con más de 4 millones de suscriptores, explicaba en un vídeo reciente que Universal Music Group (UMG) había iniciado una avalancha de reclamaciones contra su canal:"Si no lucho estas tres reclamaciones, YouTube eliminará mi canal con más de 2.000 vídeos". Las reclamaciones, decía, afectaban incluso a fragmentos de menos de un minuto: un corto con Adam Duritz (Counting Crows), otro con una canción de Olivia Rodrigo y uno sobre una banda sonora de Hans Zimmer. Ninguno de ellos generaba más de 40 dólares."Es ridículo. Estamos hablando de clips de 10 segundos en entrevistas donde el propio artista comenta su música. Eso es fair use, uso legítimo. Pero si no peleas, pierdes el canal".Beato asegura haber sufrido más de 4.000 reclamaciones en nueve años; incluso contrató a un abogado a tiempo completo para rebatirlas. "Nunca hemos perdido una sola disputa. Pero siguen llegando. Es una locura".Professor of Rock: el desgaste invisibleOtro caso similar es el del canal Professor of Rock, especializado en historia de la música y entrevistas a leyendas del pop y el rock clásico. Su creador contó entre lágrimas cómo sus vídeos son constantemente bloqueados o desmonetizados, incluso cuando utiliza apenas unos segundos de audio. "Me encanta lo que hago, pero cada vez que publico algo, recibo decenas de reclamaciones. Incluso cuando tengo permiso o estoy analizando un tema bajo el principio de fair use. Es desmotivador".El creador relató además un fenómeno preocupante: empresas que reclaman vídeos de canciones que no poseen, muchas veces desde países como Brasil. "Es un fraude masivo, y YouTube no parece estar haciendo nada".El vacío legal del “fair use” en la era del algoritmoEl uso legítimo (fair use) permite emplear fragmentos de obras protegidas sin permiso, siempre que sea con fines educativos, críticos o de comentario. En EE. UU., es un principio legal consolidado; pero YouTube no tiene obligación de aplicarlo automáticamente.Los algoritmos de Content ID no distinguen contexto ni intención: detectan coincidencias de audio y bloquean o reclaman ingresos al instante. Rebatir una reclamación es lento, y la plataforma tiende a favorecer al reclamante, incluso cuando el uso es claramente educativo o transformador. En palabras de Rick Beato:"Para hablar de una canción necesitas reproducirla. Eso es lo que define el fair use. Pero YouTube no lo respeta. Las discográficas prefieren silenciar el análisis antes que permitirlo".Los tres creadores comparten una misma frustración: su labor no compite con los artistas, los promociona. Professor of Rock lo explicaba así: "Miles de jóvenes descubren canciones clásicas gracias a nuestros vídeos. Es publicidad gratuita para los músicos". Aun así, las plataformas priorizan la seguridad jurídica ante los grandes sellos frente a la libertad creativa de los divulgadores.Imagen | Marcos Merino mediante IAEn Xataka | Youtube avisará antes de eliminar un vídeo y promete más transparencia con los creadores antes de bloquear su canal (function() { window._JS_MODULES = window._JS_MODULES || {}; var headElement = document.getElementsByTagName('head')[0]; if (_JS_MODULES.instagram) { var instagramScript = document.createElement('script'); instagramScript.src = 'https://platform.instagram.com/en_US/embeds.js'; instagramScript.async = true; instagramScript.defer = true; headElement.appendChild(instagramScript); } })(); - La noticia Tiene más de 13 millones de suscriptores y dice que YouTube le va a cerrar su canal por falsos 'strikes'. No es el único con este problema fue publicada originalmente en Genbeta por Marcos Merino .