La Guardia Civil de Cádiz ha detenido a los responsables de ocho establecimientos CBD shop acusados de un delito contra la salud pública. Según fuentes de la investigación, los locales comercializaban productos derivados del cannabis que contenían THC, el componente psicoactivo de la planta, sin la autorización legal requerida. Las intervenciones se desarrollaron en Conil, Chiclana, Barbate, Alcalá de los Gazules y Prado del Rey, dentro de una operación de inspección fiscal dirigida a este tipo de comercios.Durante las actuaciones, los agentes incautaron 16,2 kilos de sumidades floridas de cannabis, 2,6 kilos de resina de hachís y diversos productos alimenticios que contenían derivados de la planta, valorados en más de 47.000 euros. En varios locales también se retiraron vaporizadores y recambios con presencia de THC. Todos estos productos se encontraban expuestos al público y se vendían como artículos de uso recreativo o terapéutico, aunque, según la normativa internacional, todos los productos y derivados de los cogollos de la planta del cannabis y hachís, independientemente de su porcentaje de THC, están incluidos en la lista I de la Convención Única de Naciones Unidas sobre estupefacientes.Productos que han sido intervenidos.Un proveedor nacional operaba desde Conil En el marco de la misma operación, los agentes localizaron en Conil de la Frontera un almacén oculto que servía como centro logístico para la distribución de sustancias estupefacientes a nivel nacional y a través de venta online. En este punto, la Guardia Civil halló 52,5 kilos de estupefacientes preparados para su distribución, lo que lo convierte en uno de los mayores depósitos desmantelados en España dedicados a este tipo de comercio ilícito.Las investigaciones fueron desarrolladas por la Unidad de Análisis e Investigación Fiscal y Fronteras (UDAIFF), que llevaba meses siguiendo la actividad de los establecimientos. Los responsables no pudieron acreditar la trazabilidad ni la procedencia del material expuesto, requisito obligatorio para la comercialización de cualquier producto derivado del cannabis.Imagen de artículos a la venta en uno de los establecimientos.Esta actuación se enmarca dentro de una serie de operaciones previas, como Ice Shop y Sumiflor, realizadas durante los últimos meses, que ya habían permitido detener a cinco personas en distintos puntos de la provincia por hechos similares. En todas ellas, los agentes detectaron un patrón común de distribución y venta directa al público de productos ilegales bajo el amparo de supuestos comercios de CBD.En la operación participaron unidades de Barbate, Conil, Chiclana y la Pafif del Puerto de Santa María, que intervinieron las sustancias y las pusieron a disposición de la Delegación Provincial de Sanidad Exterior de Cádiz para su análisis. Las autoridades confirmaron que se ha investigado a ocho personas como presuntos autores de un delito contra la salud pública, y subrayaron que con esta operación se ha desarticulado una de las redes más grandes de venta de estupefacientes encubierta bajo la etiqueta CBD en España.