Mónica Naranjo vuelve a subirse a los escenarios con la fuerza de siempre. Su nueva gira, 'Greatest Hits Tour' , acaba de comenzar y ya está levantando pasiones en cada ciudad que pisa. Con fechas confirmadas en Sevilla, Murcia, Málaga, Valencia, Madrid y Barcelona, la artista repasa los grandes éxitos de sus más de treinta años de carrera. Sobre el escenario, la intérprete de 'Desátame' y 'Sobreviviré' muestra por qué sigue siendo una de las voces más potentes y respetadas del panorama musical español. La gira no solo celebra su trayectoria, sino que también simboliza un renacer personal y profesional tras los altibajos de los últimos años. La cantante ha visitado recientemente 'El Hormiguero' para hablar de esta nueva etapa y ha compartido anécdotas de los ensayos y reflexionado sobre lo que significa cumplir tres décadas en la música, reconociendo que aún siente los mismos nervios cada vez que se abre el telón. « Sigo emocionándome como el primer día », aseguraba con una sonrisa. Desde que lanzó su primer disco en 1994, su camino ha estado lleno de éxitos rotundos, canciones que se han convertido en historia, y algunos silencios necesarios. En un mundo donde las modas cambian a una velocidad vertiginosa, ella siempre se ha mantenido fiel a sí misma . Mónica Naranjo comenzó a cantar siendo apenas una adolescente. Con 18 años, decidió probar suerte en México , convencida de que su música encontraría allí un espacio que en España todavía no tenía. Y acertó, su disco debut, 'Mónica Naranjo', fue un fenómeno en Latinoamérica gracias a temas como 'El amor coloca' y 'Sólo se vive una vez'. Su regreso a España llegó dos años después con 'Palabra de mujer' en 1997, el álbum que la catapultó al estrellato. Canciones como 'Desátame' o 'Pantera en libertad' la convirtieron en un icono. Se hablaba de ella en los noventa como un símbolo de empoderamiento y autenticidad . En 2000 publica 'Minage', un álbum de versiones de la cantante italiana Mina que, aunque incomprendido en su momento, hoy se considera una de las obras maestras de su discografía. Es el punto de inflexión de una carrera que siempre ha oscilado entre el aplauso y la incomprensión , entre la fama y el arte. Después de aquello necesitó tomarse un tiempo y no volvió a la música hasta 2008 con 'Tarántula' y después comenzó a hacer también apariciones en televisión, entre ellas, más recientemente: 'Operación Triunfo', 'La isla de las tentaciones' o 'Tu cara me suena' han sido algunas de las más sonadas. Sin embargo, los últimos años no han estado exentos de obstáculos . En 2024, Mónica atravesó una etapa complicada debido a la cancelación de varios conciertos por cuestiones logísticas y de salud. Algunos fueron reprogramados y otros cancelados definitivamente. Ella lo explicó en su momento: «Cuando no puedo ofrecer lo que el público merece, prefiero parar », explicó, justo cuando se especulaba que estos problemas podrían estar relacionados con un momento personal convulso. Y es que en los últimos años Mónica se ha blindado en cuanto a su vida íntima se refiere , tras separarse de Óscar Tarruella, con quién estuvo más de veinte años, conoció a Laín García , escritor y conferenciante motivacional. Su relación, que comenzó discretamente, acaparó titulares hace un año, pues cuando tuvo que cancelar algunos conciertos sus fans pensaban que se debía a él. Laín es 'coach', aunque muchos se dirigen a él como 'gurú', y muchos de sus videos en redes, donde es toda una eminencia, y sus consejos son puestos en duda. Quienes no confían en su palabra consideran que solo quiere vender sus libros y su 'merchandising' con fines económicos que nada tendrían que ver con la vocación de ayudar. Pero lejos de polémicas, Mónica se posicionó al lado de su pareja , explicó lo que consideró oportuno, y ahora, además de haber puesto de nuevo en marcha la gira que entonces se quedó a medias, 'Greatest Hits Tour', está inmersa en una promoción como pocas veces ha hecho. También tomó la decisión de mantener su vida sentimental alejada de la exposición, consciente de lo que implica abrir esa puerta. « He aprendido a proteger mi paz », aseguraba en una de sus últimas entrevistas, dejando claro que su prioridad ahora es vivir con calma y disfrutar del presente. Su vuelta a los escenarios es también una declaración de intenciones: Mónica no mira al pasado con nostalgia, sino con orgullo. «Este tour es una celebración, pero también una forma de agradecer a quienes me han acompañado todos estos años», dice. La gira, que ya ha recorrido varias ciudades en América y ahora se centra en España, se presenta como un homenaje a su propia historia y a la de su público.