Dos años, más de 60.000 muertos y casi 200.000 heridos, y una hambruna después, la Unión Europea (UE) estudia restringir sus relaciones comerciales e imponer sanciones a dos ministros del Gobierno de Israel. Pero a pesar del endurecimiento de la postura ante las acciones del Ejecutivo de Binyamín Netanyahu en los últimos meses, los gobiernos europeos siguen divididos y paralizados. Analizamos la evolución de la posición comunitaria desde el inicio de la crisis. Seguir leyendo....