Una sesión del Parlamento de Nueva Zelanda tuvo que ser momentáneamente interrumpida este jueves, después de que varios diputados se arrancaran a bailar una haka (danza ceremonial maorí tradicional), tras el primer discurso de la representante del Partido Maorí, Oriini Kaipara. El presidente levantó la sesión y describió el comportamiento como despectivo. Más tarde aseguró que investigaría si alguien tenía conocimiento previo de la acción.