“Dame fuego, dame el fuego de tu amor”, cantó Javier Milei con la voz ronca, enfundado en cuero negro y el cabello ensortijado ante 15.000 personas que lo aclamaban en los límites del éxtasis colectivo en el estadio Movistar Arena de Buenos Aires. Ese fuego, que hace 50 años reclamaba con movimientos pélvicos el músico argentino Sandro, es el que fue a buscar el presidente entre su gente tras un mes en el que recibió una paliza electoral del peronismo, pidió un rescate financiero a Donald Trump y perdió a su candidato estrella a diputado por vínculos con el narco. ¿Cómo definir lo que se vivió este lunes por la noche en Buenos Aires? La presentación de un libro, titulado sin temor La construcción del milagro, fue la excusa de Milei para un recital de rock que fue también un acto de campaña, un gigantesco karaoke con esos temas “que sabemos todos” y un subidón de adrenalina indispensable para superar el mal momento. Seguir leyendo