De toda la vida de Dios, a los agonías que han ido de intensos y no se han perdido ni un sólo evento se les ha llamado jartibles. Es ese perfil de sevillano al que le encantaría que el día tuviera 36 horas para llegar todavía a muchos más sitios. Seguro que tienen a mano algún ejemplo de alguien que cumple con este requisito. Pero por si acaso, les doy aún más pistas. Es ese tipo de persona que siempre quiere más. Sale a la calle todos los fines de semana a buscar procesiones o traslados y, cuando llega la Cuaresma, sigue el rastro del incienso y la cera para encontrar su paraíso. Es ese mismo que se muda los... Ver Más