Si el Estado decidiera vender sus acciones en las nueve compañías cotizadas en las que participa -siete de ellas en el Ibex 35-, obtendría 43.000 millones de euros, sin tener en cuenta la corrección bursátil de esta semana. A través de sus participadas (Sepi, Frob y Enaire), el Estado es el segundo mayor accionista de la Bolsa española, solo por detrás de Amancio Ortega (accionista mayoritario de Inditex) y por delante de Criteria -brazo instrumental para invertir de Fundación Caixa- y de las gestoras de fondos estadounidenses BlackRock y Vanguard. Esta cantidad se compara a los 42.000 millones que el Estado pagará este año en intereses de la deuda, que suma 1,7 billones de euros. Está previsto que en 2025 España cierre con un PIB de 1,64 billones.Seguir leyendo....