Microsoft refuerza su lucha contra las trampas con nuevas medidas que incluyen verificación remota del sistema, mayor aislamiento de seguridad y requisitos como TPM 2.0 y Secure Boot.Microsoft ha detallado un nuevo conjunto de medidas antitrampas que acompañan al lanzamiento de Call of Duty: Black Ops 7, un sistema mucho más amplio que el ya conocido requisito de Secure Boot. La compañía apuesta ahora por un enfoque de cuatro pilares que pretende dificultar la manipulación del sistema operativo y reforzar la integridad del juego online.Dos de estas medidas ya son familiares para muchos usuarios. La primera es el Trusted Platform Module (TPM) 2.0, el mismo componente que ha generado confusión durante la transición a Windows 11. La segunda es Secure Boot, que algunos jugadores han conocido de cerca en títulos recientes, como Battlefield 6, al necesitar activarlo correctamente para poder iniciar ciertos juegos multijugador.Dos nuevas medidas para combatir las trampas en los juegos multijugadorLa tercera capa de protección es Virtualization-based Security (VBS). Con ella, partes críticas del sistema, como el kernel de Windows, quedan aisladas en un entorno protegido. Según Microsoft, el uso de VBS en soluciones antitrampas da a los desarrolladores "mayor certeza de que los trucos no interfieren con el juego limpio".La cuarta medida es la más novedosa: Remote Attestation. Este proceso permite que un PC envíe a un servidor externo su estado de seguridad, una vez verificado que el sistema ha arrancado en un "estado de confianza". Si se detecta un driver modificado, un proceso inusual o una alteración en el arranque, el sistema podría marcarse como no confiable antes de acceder al multijugador.Aunque la verificación remota puede parecer inocua, algunos jugadores se preguntan si herramientas legítimas como utilidades de modding para juegos de un solo jugador podrían disparar falsos positivos. La medida también implica más datos enviados desde el equipo del usuario a servidores externos, algo que genera recelos entre quienes ya desconfían del nivel de telemetría presente en los sistemas modernos.Microsoft defiende que se trata de "un enfoque ampliamente documentado y adoptado en la industria", y anima a los jugadores a "ayudar a los desarrolladores a crear comunidades de confianza" manteniendo firmware y funciones de seguridad actualizadas, habilitando TPM 2.0 y Secure Boot, y consultando las páginas oficiales de cada juego para conocer los requisitos específicos.La compañía asegura que está "trabajando con sus socios para construir herramientas y estándares que hagan el juego más seguro", mientras el debate entre seguridad, privacidad y control del sistema continúa abierto.