El Juzgado de Violencia sobre la Infancia de Las Palmas de Gran Canaria ha dejado sin efecto la orden de prisión dictada en julio contra un joven marroquí acusado inicialmente de provocar un incendio en el que resultó gravemente herida una menor. La decisión se produce tras incorporarse al sumario la declaración de la víctima, en la que sostiene que el fuego fue accidental y que el joven trató de auxiliarla.Según el auto, el magistrado recibió la grabación de la Policía Nacional con el testimonio de la adolescente, que permanece ingresada en el Virgen del Rocío especializado en grandes quemados con lesiones en la mitad de su cuerpo. A la espera de que se determinen las posibles responsabilidades, el procesado quedará en libertad con la obligación de comparecer semanalmente ante el juzgado y la prohibición de salir de Gran Canaria.[articles:338213]Los hechos tuvieron lugar en la madrugada del 16 de julio en una vivienda ocupada del barrio de La Isleta. En ella se encontraban el joven, identificado como Abarrafía H., de 20 años y recién llegado en patera a las islas, y la menor, una española de 17 años tutelada por el Gobierno canario que se había fugado de un centro de acogida. El incendio provocó graves quemaduras a la joven y generó dudas sobre su origen.En un primer momento, las palabras de la víctima a los equipos de emergencia apuntaron al joven como responsable, lo que llevó al juez a decretar su ingreso en prisión preventiva por riesgo de fuga, dada su situación de inmigrante irregular sin arraigo. No obstante, en aquella resolución ya se subrayaba que no existían indicios de que hubiera utilizado líquidos inflamables y que los vídeos examinados mostraban que intentó auxiliar a la menor.El juez cree a los jóvenesEl juez señala ahora que la versión de la adolescente coincide con la del investigado y con la reconstrucción practicada, confirmando la hipótesis policial de que ambos estaban fumando en un colchón cuando se originó el fuego. Informes de Bomberos y Policía Científica apuntan en la misma dirección y un vídeo analizado revela que ambos se reencontraron en la vía pública tras salir del inmueble, donde se abrazaron.El suceso se produjo en un contexto de tensión social tras los incidentes de Torre Pacheco, en Murcia, donde se habían registrado ataques contra inmigrantes. En Las Palmas, la detención del joven motivó una concentración y una manifestación en el barrio de La Isleta para reclamar la expulsión de irregulares, actos que transcurrieron sin incidentes.