Perder el mando a distancia del televisor es uno de esos pequeños dramas cotidianos que todos vivimos. Ya sea porque se ha deslizado entre los cojines del sofá o porque algún miembro de la familia lo llevó a otra habitación por error, el resultado es el mismo: frustración y una interrupción no deseada del entretenimiento. Google ha tomado nota de este problema tan común y ha introducido distintas soluciones, desde dispositivos dedicados como el Google TV Streamer (4K) hasta opciones más accesibles como usar el smartphone como mando.El botón que hace sonar el mandoEl nuevo Google TV Streamer (4K) viene con un pequeño gran detalle: un botón físico en la parte trasera que, al presionarlo, hace sonar el mando a distancia. Este pitido permite localizarlo rápidamente en cualquier rincón de la casa. Esta función está claramente pensada para aquellos hogares donde los mandos desaparecen con frecuencia y el tiempo de búsqueda puede convertirse en una odisea.La alternativa gratuita: el móvil como mandoPara quienes no quieren o no pueden invertir los casi 100 dólares que cuesta el dispositivo, Google ofrece una solución igual de funcional, aunque con algunas limitaciones: usar el móvil como mando a distancia. Esta opción está disponible a través de la aplicación Google TV, tanto en Android como en iOS, lo que significa que puedes controlar tu dispositivo Google TV incluso desde un iPhone.El proceso es sencillo. Una vez instalada la app, al abrirla aparece un icono en la esquina inferior derecha que muestra los televisores compatibles cercanos. Basta con seleccionar el televisor deseado para que aparezca una interfaz de mando con los botones esenciales como inicio, retroceso y direccionales. Aunque se pierden algunos accesos directos como los botones de Netflix o YouTube, la experiencia general es bastante fluida.Acceso rápido con widgetsUna de las quejas comunes al usar el móvil como mando es el tiempo que toma abrir la aplicación en momentos clave, como cuando se quiere omitir una introducción rápidamente. Google soluciona esto con un widget en la pantalla de inicio que permite abrir directamente la interfaz del mando sin retrasos. Este pequeño acceso directo se convierte en una herramienta práctica para quienes buscan inmediatez.Más allá de AndroidEl ecosistema Google no discrimina por marca de móvil. Aunque tener un Pixel da ciertas ventajas, cualquier teléfono Android moderno, como un Samsung Galaxy S25, puede usar la app sin inconvenientes. Incluso los usuarios de iPhone, con un iPhone 16 por ejemplo, pueden convertir su dispositivo en un mando a distancia para Google TV.Esto amplia la compatibilidad y facilita que cualquier miembro de la casa pueda usar su propio teléfono para controlar la televisión, siempre que se haya hecho la configuración previa.Limitaciones del mando virtualAunque el uso del móvil como mando es práctico, no sustituye completamente al mando físico. El principal inconveniente es que no permite controlar otros dispositivos vinculados, como barras de sonido. Si se pierde el mando y se quiere subir el volumen, por ejemplo, el móvil no servirá de ayuda, obligando a levantarse y hacerlo manualmente.Además, el uso de la pantalla táctil puede resultar menos intuitivo. A diferencia de los botones físicos, que permiten cambiar de opción sin mirar, con el táctil es necesario fijar la vista en el móvil para evitar errores, lo que entorpece la navegación rápida.Cuando la tecnología no es para todosOtra limitación es el factor humano. No todos en casa están igual de familiarizados con la tecnología. En muchas familias, hay personas que prefieren el mando tradicional por su simplicidad. En esos casos, el móvil como mando no es una solución universal, y la pérdida del control remoto puede seguir siendo un problema.Mejoras en el ecosistema GooglePese a estas limitaciones, el ecosistema Google está diseñado para ofrecer soluciones integradas. Incluso es posible usar comandos de voz desde dispositivos como el Google Nest Hub para encontrar el mando, diciendo: «Hey Google, encuentra mi mando». Esta funcionalidad combina la inteligencia del asistente con la ubicación del hardware, simplificando aún más el proceso.No todo es perfecto, claro. El ecosistema también sufre de pequeños fallos. A veces hay que reiniciar dispositivos como el Nest Hub Max para que vuelvan a funcionar correctamente. Pero cuando todo está sincronizado, la experiencia es bastante fluida y cómoda.Una solución con espacio para mejorarLa incorporación del botón para localizar el mando es un gran paso, pero hay margen para mejorar la compatibilidad entre dispositivos. Sería ideal que la app también pudiera manejar sistemas de sonido o tener una función háptica que simule botones físicos para una experiencia táctil más realista.Mientras tanto, usar el móvil como mando para Google TV es una solución práctica y accesible que resuelve el problema de forma eficaz. Y para quienes buscan una experiencia más completa, el Google TV Streamer (4K) sigue siendo una opción muy atractiva gracias a su rendimiento mejorado y mayor integración con funciones inteligentes.La noticia No pierdas más el control: cómo usar tu móvil como mando para Google TV fue publicada originalmente en Wwwhatsnew.com por Natalia Polo.