Como si fuera un gran secreto, la actriz Nagore Aranburu (Azpeitia, Gipuzkoa, 49 años) ha estado durante años trabajando sin parar, de película en película, mientras directores como los Moriarti, Asier Altuna o Telmo Esnal hablaban maravillas de su capacidad interpretativa. Sin embargo, el resto de los espectadores españoles se fijaron en ella gracias a la concatenación de La herida, Loreak y Amama, siguió siendo esa cara secundaria en Patria, Competencia oficial o Irati, hasta que llegó el estallido de su Miren de Querer. La mirada sobre Aranburu del público ha cambiado. “Aquí [se refiere a San Sebastián, donde vive] nada ha cambiado, en Madrid obviamente me ven de otra manera”. El Zinemaldia se ha convertido en esta edición en el escaparate de Aranburu, que de domingo a viernes asistirá a cuatro estrenos en la sección Oficial (aunque no todos a concurso): tres películas y una serie. “En el último año y medio he trabajado mucho. Es hora de disfrutar y descansar”, sonríe.Seguir leyendo