En la NFL, iniciar la temporada con récord de 0-2 no es el fin del mundo —mucho menos si se trata de los Kansas City Chiefs y la dinastía de Patrick Mahomes aún con signos vitales—, pero sí un terreno resbaladizo que pocos equipos desearían pisar. Caer a 0-3 como recién los Miami Dolphins tras perder ante Buffalo Bills, sin embargo, es prácticamente una sentencia de muerte.LEE ADEMÁS: Sheinbaum rinde homenaje a víctimas de terremotos históricosY es que desde 1990, solo el 12.2% de los equipos que comenzaron con dos derrotas y ninguna victoria, lograron clasificar a los Playoffs, un porcentaje que se mantiene incluso tras la expansión de la postemporada en 2020. Peor aún, apenas el 2.4% de los equipos con 0-3 han alcanzado la postemporada desde hace 35 años, y ninguno lo ha conseguido desde 2020.Estas estadísticas, conocidas por todo el entorno de la liga, encienden las alarmas en varias franquicias tras solo dos semanas de acción. Y aunque son un total de 10 equipos aún sin triunfos en 2025, lo cierto es que hay una pronunciada brecha entre todos ellos.A la cabeza de la crisis están los Miami Dolphins, cuyo colapso es ya palpable. Tras una derrota por 31-21 ante Buffalo Bills este jueves, completan un 0-3 desastroso. El equipo ha sido superado en todas las facetas del juego, con fallos tanto en ataque como en defensa.Las derrotas ante New England Patriots e Indianapolis Colts dejaron al descubierto carencias estructurales. El entrenador Mike McDaniel pende de un hilo, y su continuidad incluso más allá de septiembre, es incierta.No muy lejos de ese abismo, los Houston Texans enfrentan su propia encrucijada. Tras desperdiciar una ventaja tardía ante Tampa Bay Buccaneers, la presión se cierne sobre el mariscal de campo CJ Stroud y una ofensiva que luce descoordinada.Con solo dos touchdowns en sus dos primeros juegos —en su debut ante Los Angeles Rams no produjeron uno solo—, las críticas se vierten sobre Nick Caley, coordinador ofensivo recién llegado para este año. Su próximo partido en Jacksonville Jaguars se antoja crucial, pero persisten las dudas sobre una línea ofensiva débil y una defensa frágil en momentos clave.En Chicago, el sueño de novato de Caleb Williams se ha tornado en pesadilla apenas en su segunda temporada. Los Bears han sufrido derrotas humillantes dentro de su división, incluido un colapso en el partido inaugural ante Minnesota Vikings.La organización parece no tener rumbo, y el egresado de USC podría terminar como chivo expiatorio de un equipo que no está ni cerca de tener una temporada ganadora. Una constante que ya cobró factura a primeras selecciones como Mitch Trubisky y Justin Fields hace no mucho tiempo.Del lado de los New York Giants al menos se vislumbra una esperanza, pues la llegada del novato Jaxson Dart, seleccionado en primera ronda, podría revitalizar un equipo que aún lucha por encontrar su identidad bajo el entrenador Brian Daboll.TAMBIÉN PUEDES LEER: Grupo Salinas debe pagar, insiste SheinbaumPero mientras Russell Wilson siga en los controles y en las altas cúpulas no exista una dirección clara, no parece que su destino pueda ser otro que el que han sufrido desde los últimos años de Eli Manning en la institución.En el otro extremo de la escala de expectativas, los Kansas City Chiefs demuestran que tener a Patrick Mahomes y Andy Reid equivale a un salvavidas. A pesar de lesiones, suspensiones y un calendario exigente, la dupla estrella que tantos éxitos ha traído, mantiene viva la fe en una recuperación.Pero incluso ellos saben que dependen de que Mahomes se mantenga en pie y recobre esa chispa que parece extinta desde el brutal golpe que le representó ser sometido en el máximo escenario, en el pasado Super Bowl, a manos de Philadelphia Eagles.Mientras tanto, en Carolina reina la desolación. Los Panthers son, simple y llanamente, el peor equipo de la liga desde hace mucho tiempo. Bryce Young no ha podido levantar el vuelo, y la defensa es un desastre absoluto. Para ellos, la temporada ya parece una condena.El mariscal de campo de los Carolina Panthers, Bryce Young. | ReutersPor su parte, New York Jets, Cleveland Browns y New Orleans Saints cumplen con las bajas expectativas que se tenían sobre ellos. Lesiones, transiciones y falta de impacto definen sus campañas, lo que confirma que su 2025 no es otra cosa que un año de reconstrucción.Mención aparte para Tennessee Titans, equipo donde se atisba un rayo de luz con el novato Cam Ward, quien ha mostrado temple y eficacia, al lanzar de forma certera y aún sin intercepciones, a pesar de una línea ofensiva diezmada. Aunque el entrenador Brian Callahan aún parece verde, el desarrollo del novato pasador da motivos para el optimismo.Es así como la Semana 3 promete ser un punto de inflexión. Para algunos —como Chiefs o incluso los Titans— hay margen para la fe. Pero para otros, como Dolphins o Panthers, el abismo se acerca rápidamente como una inevitable guillotina para muchos altos mandos y hasta para jugadores convertidos ya en apuestas fallidas.The post ¿Son los Chiefs tan malos como los Panthers? La engañosa realidad que divide a los equipos sin triunfos en el inicio de la NFL 2025 first appeared on Ovaciones.