El pulso diplomático para conseguir la oficialidad del catalán, el gallego y el euskera en la Unión Europea sigue vivo, aunque con un calendario muy incierto. El jueves, Pedro Sánchez utilizó su reunión bilateral con el canciller alemán, Friedrich Merz, para volver a presionar a Berlín, considerado clave para desbloquear la medida. Llevamos 40 años esperando este momento y espero que podamos lograrlo en un futuro no muy lejano, pidió el presidente del Gobierno ante los medios en la Moncloa. Este viernes, el ministro de Exteriores español, José Manuel Albares, explicó que Alemania ha pedido "más tiempo", pero ha advertido de que "es un objetivo irrenunciable para el Gobierno de España y es un camino irreversible". Seguir leyendo....