¿Qué era la misteriosa bola de fuego que cruzó el cielo de Andalucía?

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Una espectacular bola de fuego atravesó el cielo del sur peninsular durante la madrugada del 18 de septiembre, generando una intensa luminosidad que fue visible desde diversos puntos de Andalucía. El fenómeno tuvo lugar a las 04.11 horas y fue registrado por las cámaras del Observatorio Astronómico de Calar Alto, en Almería, así como por otros puntos del Proyecto SMART, entre ellos La Hita (Toledo), Sierra Nevada, La Sagra, Otura (Granada), Huelva y Sevilla.Según los datos técnicos facilitados por los investigadores, el bólido era de origen cometario y alcanzó una velocidad estimada de 58.000 kilómetros por hora. El evento comenzó a una altitud de 101 kilómetros y descendió hasta los 67 kilómetros sobre el mar Mediterráneo, donde se extinguió finalmente. La estela dejada en su trayectoria, junto a varias fulguraciones, provocó un espectáculo visual que sorprendió a quienes aún permanecían despiertos a esa hora.Una estela colorida y varias explosiones de luz visibles desde tierraLas imágenes captadas por las cámaras externas del observatorio de Calar Alto muestran claramente la evolución del meteoro, que se desplazó a gran velocidad en dirección sureste. Durante su trayectoria, generó una estela colorida que iba cambiando de intensidad conforme perdía altitud. Este tipo de bolas de fuego, también conocidas como bólidos, forman parte del seguimiento astronómico que realizan distintos observatorios en la península con fines científicos.El Proyecto SMART, coordinado por la Red de Bólidos y Meteoros del Suroeste de Europa, tiene como objetivo monitorizar la entrada de rocas espaciales a la atmósfera terrestre. Gracias a un sistema de cámaras automáticas, se pueden estudiar las características físicas y químicas de estos objetos, así como su procedencia. En el caso de este último bólido, se trata de material desprendido de un cometa, lo que justifica tanto su alta velocidad como su comportamiento al entrar en contacto con la atmósfera.Fenómenos similares se han reportado en distintas regiones de España a lo largo del año. En julio, otra bola de fuego sobrevoló Castilla-La Mancha, y en agosto, un bólido de gran intensidad cruzó el cielo de Andalucía. Estas apariciones, aunque no frecuentes, se han vuelto más visibles gracias a la mejora en los sistemas de detección nocturna, y permiten a la comunidad científica estudiar el comportamiento de los cuerpos celestes que se aproximan a la Tierra.