El rechazo a la planta de fibras textiles proyectada por Altri en Palas de Rei (Lugo) ha vuelto a congregar este domingo a miles de personas en Santiago de Compostela en una movilización convocada por Ulloa Viva, la Plataforma en Defensa da Ría de Arousa (PDRA), la Plataforma Veciñal contra a Mina de Touro-O Pino y otra decena de entidades, además de contar con el apoyo de PSdeG y BNG. Además de las habituales 'estreleiras' nacionalistas, han destacado entre los símbolos y objetos portados por los asistentes que ocuparon parte de la Plaza del Obradoiro los paraguas . No porque lloviese, puesto que el tiempo ha respetado en esta ocasión a los manifestantes, sino porque los llevaban decorados con hojas de árboles con la intención de simbolizar un bosque. En declaraciones en la Alameda compostelana antes de iniciar la marcha, la portavoz de Ulloa Viva, Marta Gontá, ha explicado que «estamos aquí para defender que los recursos que tenemos sean para nuestras hijas e hijos y no para que acaben en la mano de empresas que lo único que nos traen es pobreza». La portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, ha mostrado su oposición al «franquismo industrial de las macrocelulosas, que es lo único que puede ofrecernos el señor Rueda», protagonista de algunas de las pancartas. En pleno 'caso Tomé', por el PSdeG no ha estado José Ramón Gómez Besteiro, sino su número 2, Lara Méndez, que pidió al presidente de la Xunta que haga público el acuerdo «oculto» que, sugiere, mantiene con Altri. La compañía ha remitido un comunicado a los medios lamentando que «una parte de la sociedad siga teniendo una percepción negativa» de un proyecto que ha sido reconocido con el sello STEP por la Comisión Europea, «reservado a aquellas iniciativas industriales que contribuyen de forma destacada a los objetivos estratégicos de la Unión Europea en materia industrial, tecnológica y medioambiental».