El Samsung Galaxy Z TriFold acaba de convertirse en el primer plegable de la marca surcoreana que literalmente se rinde ante las pruebas extremas de JerryRigEverything.Y sí, aunque Samsung presume que este dispositivo puede aguantar hasta 200,000 plegados, resulta que un simple doblez en la dirección incorrecta fue suficiente para mandarlo directo al cementerio de los smartphones.Un teléfono diseñado para impresionar (pero no para durar)Con apenas 3.9 mm de grosor en su punto más delgado, el Galaxy Z TriFold es una verdadera proeza de ingeniería. Pero ahí está el detalle: ser tan delgado tiene su precio.El popular YouTuber Zack Nelson sometió este dispositivo a su batería habitual de torturas – rasguños, fuego, polvo y, por supuesto, el temido test de flexión. Lo que nadie esperaba era que el teléfono colapsara tan fácilmente.El panel trasero, fabricado con fibra de vidrio (que al final del día es solo plástico elegante), se raya con una facilidad pasmosa. Nada que no hayamos visto en otros plegables, claro.Pero cuando añades bisagras que crujen al primer contacto con arena y un chasis que prácticamente suplica misericordia bajo presión… bueno, ahí empiezan los problemas de verdad.La prueba definitiva que nadie quería verAquí viene lo interesante. Cuando Zack intentó doblar el teléfono en la dirección opuesta a su diseño – algo que ningún usuario normal haría, pero que sirve para medir la integridad estructural – el Galaxy Z TriFold simplemente se quebró.Los píxeles se rasgaron, la pantalla murió al instante y la línea de antena del marco de aluminio cedió sin oponer resistencia.Samsung ha declarado que este teléfono puede resistir 200,000 plegados si lo usas correctamente, lo cual se traduce en unos cinco años de uso normal. Sin embargo, esa cifra solo aplica cuando sigues las instrucciones al pie de la letra.El dispositivo incluso vibra y te advierte si intentas plegarlo desde el lado equivocado, el que tiene las cámaras traseras.Tres baterías y un diseño arriesgadoDurante el desmontaje posterior al test de flexión, JerryRigEverything reveló que el TriFold alberga tres baterías individuales repartidas en sus tres secciones plegables, con una capacidad total de 5,600 mAh.Pero hay un problemilla adicional: el sistema de lengüetas para extraer las baterías hace que estas se doblen durante la remoción, lo cual representa un riesgo potencial de seguridad.Tampoco hay pasta térmica ni hardware de enfriamiento especializado en el interior. Samsung confía únicamente en el delgado marco de aluminio para disipar el calor, lo cual es… optimista, por decir lo menos.¿Significa esto que es un mal teléfono?La respuesta corta es: no, pero tienes que tratarlo como lo que es, un dispositivo extremadamente delicado.La pantalla interior de 10 pulgadas se raya con una uña (nivel 2 en la escala de Mohs), mientras que la pantalla exterior de Gorilla Glass Ceramic 2 resiste hasta el nivel 6. Eso significa que debes mantener alejadas las llaves, monedas y, definitivamente, cualquier rastro de arena o polvo.La certificación IP48 suena prometedora hasta que te das cuenta de que las partículas finas todavía pueden infiltrarse en las bisagras. Durante las pruebas con polvo, las bisagras empezaron a hacer ruidos crujientes inmediatamente después de un par de plegados.El Galaxy Z TriFold es una maravilla tecnológica que empuja los límites del diseño, pero con un compromiso significativo en durabilidad.Fuente: YouTubeThe post Galaxy Z TriFold muestra el precio de ser demasiado delgado first appeared on PasionMóvil.