Los pequeños municipios de la Comunidad de Madrid , los que tienen menos de 20.000 habitantes y que son 143 del total de 179 que hay en la región, seguirán recibiendo una inyección de dinero el año que viene para mejorar su embellecimiento, tanto en las vías principales como en los entornos urbanos. En los dos últimos años, la Comunidad ha destinado 23 millones de euros, en el marco del programa 'Pueblos con vida' , a la ejecución de 136 actuaciones de embellecimiento de los pequeños municipios. En la última reunión del Consejo de Gobierno se aprobaron otros siete millones de inversión, para mantener las ayudas en el año 2026. Los proyectos subvencionados incluyen la renovación de calles y plazas, la rehabilitación de fachadas y cubiertas de edificios públicos, la mejora de zonas verdes urbanas, la adquisición de mobiliario urbano y medidas de soterramiento de redes eléctricas, de telefonía o pasos ferroviarios. Entre las localidades que ya se han beneficiado de este programa figuran Rozas de Puerto Real, con la construcción y reforma de varias áreas recreativas; Puentes Viejas, donde se ha actuado en su casco histórico; Garganta de los Montes, con la remodelación de la calle principal San Isidro y su entorno; y Villamanta, donde se ha renovado la Plaza Mayor. Próximamente, están previstas nuevas intervenciones como el soterramiento de redes eléctricas en Brunete, la creación de una senda peatonal y espacios verdes en Batres, o la modernización de la Casa Consistorial de Belmonte de Tajo y de la plaza del antiguo colegio en Los Molinos, según informa la Comunidad de Madrid. Estas ayudas se enmarcan en el programa del Ejecutivo autonómico 'Pueblos con Vida', un plan con 13 medidas para revitalizar los municipios de menos de 20.000 habitantes. Entre sus objetivos destacan fijar población y atraer vecinos, impulsar el desarrollo económico y el turismo, contribuir al reequilibrio territorial y reforzar los servicios públicos. Frenar la despoblación de estos municipios es uno de los principales objetivos de los planes autonómicos que buscan reforzar el comercio local o amplían la oferta de vivienda asequible para jóvenes. Se trata de atraer población y fijarla en estos municipios, al mismo tiempo que se impulsa su desarrollo económico y se garantizan los servicios básicos.