SpaceX continúa con paso firme en la expansión de su red de satélites Starlink. El pasado 4 de diciembre, la compañía llevó a cabo el lanzamiento de la misión Starlink 11-25 desde la base de Vandenberg, en California, a bordo de un cohete Falcon 9. Esta operación añade 28 nuevos satélites a su creciente constelación destinada a ofrecer conectividad global de banda ancha desde el espacio.El despegue se realizó a las 12:42 p.m. hora local, marcando el cuarto lanzamiento del mes con este objetivo y el número 114 en lo que va de año dedicado a Starlink. Con este ritmo, SpaceX consolida su posición como el principal actor del sector de lanzamientos espaciales comerciales, manteniendo una cadencia que antes parecía reservada a misiones gubernamentales de alto presupuesto.Una coreografía tecnológica precisaEl cohete utilizado para esta misión fue un Falcon 9 con el identificador B1097, un veterano que realizaba su cuarto vuelo. En lanzamientos anteriores, esta misma unidad ya había transportado el satélite Sentinel-6B y participado en otras dos misiones Starlink. La reutilización de estos propulsores es clave en el modelo de SpaceX, que apuesta por reducir costes sin sacrificar fiabilidad.Tras poco más de ocho minutos de vuelo, el propulsor regresó con éxito a la Tierra, aterrizando en la plataforma flotante ‘Of Course I Still Love You’, situada en el Océano Pacífico. Este aterrizaje fue el número 167 logrado por esta nave y el 544º de SpaceX en total, cifras que ilustran cómo el aterrizaje vertical de cohetes se ha convertido en una rutina gracias a la ingeniería de la compañía de Elon Musk.Una red en constante crecimientoAntes de este último lanzamiento, SpaceX ya había desplegado 2.915 satélites Starlink en 2025, distribuidos en 113 misiones. Cada nuevo grupo que se suma a la constelación mejora la cobertura y la calidad del servicio, que actualmente ya se ofrece en decenas de países. El objetivo final es lograr una conectividad confiable incluso en las regiones más remotas del planeta, como si una red de linternas en el cielo enviara señales de internet a cada rincón de la Tierra.En los días siguientes al lanzamiento, la compañía tiene previstas al menos tres misiones Starlink más, entre el 7 y el 10 de diciembre. Esta frecuencia de actividad refleja tanto la madurez del sistema como la ambición de alcanzar una cobertura global sostenida.Coexistencia con otras misiones espacialesEn paralelo a las misiones Starlink, SpaceX mantiene una agenda variada. Uno de los lanzamientos más esperados es la misión NROL-77, programada para el 9 de diciembre desde la estación espacial de Cabo Cánaveral. Este vuelo transporta una carga clasificada del gobierno de Estados Unidos, gestionada por la Oficina Nacional de Reconocimiento (NRO), lo que refuerza la confianza que organismos oficiales tienen en las capacidades logísticas y tecnológicas de la empresa.La habilidad de SpaceX para intercalar misiones comerciales, gubernamentales y de desarrollo propio como Starlink, demuestra una flexibilidad operativa poco común en la industria aeroespacial. Es como si una misma compañía gestionara una aerolínea comercial, una flota de aviones de carga y una red de vuelos privados de alto nivel, todo al mismo tiempo.Impacto y futuro de la conectividad satelitalEl sistema Starlink busca ofrecer una alternativa viable al internet tradicional en lugares donde la infraestructura terrestre es insuficiente o inviable. Esto incluye desde zonas rurales hasta regiones afectadas por desastres naturales, donde restablecer la conectividad puede ser crucial para coordinar ayuda y salvar vidas. Al mismo tiempo, representa un cambio estructural en cómo entendemos el acceso a la información: no depende de cables o antenas locales, sino de una red de satélites en constante movimiento.Sin embargo, este modelo también plantea desafíos. La saturación del espacio con objetos en órbita baja aumenta el riesgo de colisiones y exige una gestión rigurosa del tráfico espacial. Aunque SpaceX afirma contar con sistemas de seguimiento y maniobra automática para evitar accidentes, la comunidad internacional observa con atención el crecimiento de estas megaconstelaciones.Una nueva era en la logística espacialLo logrado con esta misión Starlink 11-25 no es un hecho aislado, sino parte de una tendencia que redefine la forma de operar en el espacio. Con una flota de cohetes reutilizables y una red de satélites propia, SpaceX ha cambiado las reglas del juego. Ya no se trata solo de llegar al espacio, sino de hacerlo con eficiencia, frecuencia y un propósito comercial claro.Mientras otras empresas aún dan sus primeros pasos en este tipo de servicios, SpaceX ya está optimizando la logística de sus misiones, lo que podría dar lugar a una economía espacial más accesible y competitiva. El lanzamiento del 4 de diciembre es un ejemplo más de cómo la exploración espacial ya no es exclusiva de las agencias estatales, sino una actividad donde la iniciativa privada tiene un papel protagónico.La noticia SpaceX refuerza su constelación Starlink con un nuevo lanzamiento desde California fue publicada originalmente en Wwwhatsnew.com por Natalia Polo.