¿Pudieron las condiciones climáticas y sus oscilaciones influir en los grupos de neandertales y los nuevos humanos venidos de África en la desaparición de los primeros o en la mezcla de ambos grupos sobre la península ibérica? Un nuevo estudio analiza los posibles escenarios.Dibujos en las paredes de nuestros ancestros. Universidad de ColoniaInvestigadores de la Universidad de Colonia han desarrollado un modelo de simulación para examinar cómo los neandertales y los humanos anatómicamente modernos pudieron haberse encontrado en la península ibérica durante el Paleolítico. El trabajo se centra en el período comprendido entre hace aproximadamente 50.000 y 38.000 años, cuando los primeros humanos modernos entraron en Europa y las poblaciones neandertales aún estaban presentes en la región. El equipo reconstruyó las zonas de asentamiento y los patrones de movimiento de ambos grupos para evaluar si se solaparon, si pudo haber habido mestizaje y cómo la variabilidad climática pudo haber moldeado su dinámica poblacional.El estudio, que traducido al castellano sería: "Caminos en la encrucijada ibérica: Modelado dinámico de la transición del Paleolítico Medio-Superior", dirigido por el profesor Yaping Shao, del Instituto de Geofísica y Meteorología, se publica en la revista PLOS One y forma parte del proyecto de investigación HESCOR de la Universidad de Colonia, llevado a cabo con el arqueólogo prehistórico Gerd-Christian Weniger. Posibles encuentros en IberiaLos investigadores aplicaron un modelo numérico para explorar posibles encuentros entre neandertales y humanos modernos en la península ibérica, incorporando explícitamente las fluctuaciones climáticas a la vez que simulaban el tamaño de las poblaciones, la conectividad y las interacciones. A diferencia de los enfoques arqueológicos o genéticos tradicionales, que se basan en escasa evidencia física, el modelo permite generar y probar una amplia gama de escenarios, proporcionando así un marco interpretativo adicional.«Al vincular el clima, la demografía y la cultura, nuestro modelo dinámico ofrece un marco explicativo más amplio que permite una mejor interpretación de los datos arqueológicos y genómicos», afirma el profesor Weniger, del Departamento de Arqueología Prehistórica. Durante la transición del Paleolítico Medio al Superior, las poblaciones neandertales de toda Europa, especialmente de la península ibérica, se vieron amenazadas de extinción a medida que los humanos modernos se expandían por el continente. Este intervalo coincidió con pronunciadas oscilaciones climáticas que alternaban fases frías y cálidas, incluyendo episodios de calentamiento rápido a lo largo de varios siglos y tendencias de enfriamiento más lentas, conocidas como eventos Dansgaard-Oeschger, interrumpidas por fuertes olas de frío vinculadas a los eventos Heinrich, provocadas por grandes descargas de icebergs en el Atlántico Norte.La cronología exacta de la desaparición de los neandertales y la llegada de los humanos modernos sigue sin resolverse, lo que deja abierta la posibilidad de que ambos grupos se solaparan. Las comparaciones genéticas entre huesos antiguos y humanos actuales indican un mestizaje temprano en Europa oriental durante las primeras migraciones humanas modernas. No se puede descartar una mezcla posterior en la península ibérica debido a las incertidumbres en la datación, aunque hasta la fecha no se ha confirmado ninguna evidencia directa."Las ejecuciones repetidas del modelo con diferentes parámetros permiten evaluar la plausibilidad de diferentes escenarios: una extinción temprana de los neandertales, un tamaño poblacional pequeño con alto riesgo de extinción o una supervivencia prolongada que permitiría la mezcla", afirma el profesor Shao, investigador principal del estudio. Sin embargo, en la mayoría de las simulaciones, las poblaciones neandertales y humanas modernas no se solaparon lo suficiente en el espacio y el tiempo como para interactuar. En los tres escenarios principales, las trayectorias poblacionales demostraron ser muy sensibles a las fluctuaciones climáticas, que podrían empujar a los grupos hacia la extinción o permitirles persistir el tiempo suficiente para el contacto.En simulaciones donde las poblaciones se mantuvieron estables durante más tiempo, el modelo permitió la mezcla genética entre neandertales y humanos modernos. En una pequeña fracción de las ejecuciones, alrededor del 1 %, la población simulada final contenía entre un 2 % y un 6 % de individuos con ascendencia de ambos grupos. Según el modelo, esta mezcla habría sido más probable en el noroeste de la Península Ibérica, donde los humanos modernos podrían haber entrado con suficiente antelación antes de que los neandertales desaparecieran por completo.Artículo relacionadoIdentifican restos neandertales de hace más de 50.000 años en la Cova Simanya, en BarcelonaEl equipo planea perfeccionar tanto el modelo numérico como el campo potencial que lo sustenta en trabajos futuros. Pretenden añadir poblaciones animales como presas potenciales, utilizando datos de vegetación para construir campos potenciales separados para humanos y animales a partir de datos climáticos y geográficos combinados. Los investigadores también están probando si un algoritmo especializado de aprendizaje automático puede ayudar a mejorar estas reconstrucciones y el rendimiento general del modelo.Fuente: Universidad de Colonia ReferenciaYaping Shao, et al, Pathways at the Iberian crossroads: Dynamic modeling of the middle–upper paleolithic transition. PLOS One. https://doi.org/10.1371/journal.pone.0339184