La fijación del salario mínimo cobra especial importancia en Colombia no solo porque define la base de los ingresos de millones de trabajadores, sino que también representa un derecho fundamental en materia laboral, y su valor actúa como una garantía mínima para que las personas puedan acceder a condiciones de vida dignas. En este sentido, ¿cuál debería ser el monto para el 2026? La IA hace su pronóstico.Cada año, el salario mínimo se define considerando factores económicos, sociales y políticos, con empleadores, sindicatos y Gobierno. Para esto, la IA ayuda a proyectar valores que respondan mejor a la población y garanticen sostenibilidad.De acuerdo con los cálculos realizados por ChatGPT, el salario mínimo en Colombia para 2026 debería situarse entre $1'487.000 y $1'601.865, y propone los siguientes aumentos:+ 4,5%: $1'487.000.+ 6%: $1'509.000.+ 7%: $1'524.000+ 10%: $1'565.850.+ 12,4%: $1'601.865.Aclaro que las cifras son aproximadas y no incluyen posibles ajustes de auxilio de transporte ni efectos secundarios de inflación.(LEA MÁS: Las 14 profesiones mejores pagas en Colombia de 2025, según un importante estudio)TrabajadoresFuente: CanvaDe acuerdo con un análisis publicado por Bloomberg Línea, una subida del salario mínimo para 2026 que se aleje de los criterios técnicos y responda más a presiones políticas podría tener consecuencias directas en la estabilidad de precios.En ese sentido, el informe señala que, si bien el ajuste salarial busca proteger el poder adquisitivo de los hogares, un incremento excesivo, cercano o superior al 12 %, podría consolidar presiones inflacionarias que dificulten alcanzar la meta del Banco de la República, situada en el 3%.(LEA MÁS: Si le faltan 5 años para pensionarse, Colpensiones pide que sí o sí haga esto)Los expertos advierten que un aumento “rebelde”, como lo denominan, se traduciría en mayores costos laborales para las empresas, lo cual inevitablemente se trasladaría al precio de bienes y servicios.Y si bien no todos coinciden en que esta relación es tan lineal e inevitable, esta dinámica, lejos de fortalecer la economía, podría generar un efecto en cadena que mantendría la inflación persistentemente por encima de su rango objetivo.El reto para establecer un nuevo salario mínimo, cuyas negociaciones comenzarán en diciembre, no será únicamente fijar una cifra justa para los trabajadores, sino también mantener un equilibrio con la sostenibilidad macroeconómica.