Extremadura ha dado su último adiós al que fue su presidente durante doce años, Guillermo Fernández Vara , cuyo cuerpo, ya sin vida, descansa en su Olivenza natal. La iglesia de la Magdalena ha acogido la misa funeral, presidida por el arzobispo de Mérida-Badajoz y concelebrada por los obispos de Coria-Cáceres y Plasencia, que ha durado cerca de dos horas y a la que han asistido centenares de personas. Cerca de las 11.15 horas, llegaba el coche fúnebre a las puertas de la parroquia recibido por una ovación cerrada y larguísima, de varios minutos. En un ambiente sobrecogido, de dolor en el rostro de sus vecinos, que han querido despedir al oliventino más ilustre. El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, ha estado presente en la misa funeral. Llegaba antes de las once de la mañana acompañado de varios miembros de su Ejecutivo como Carlos Cuerpo, Félix Bolaños, Luis Planas o María Jesús Montero. Un despliegue total y visible. De hecho, Sánchez ha resaltado la figura de Fernández Vara como un «referente para Extremadura» y un «servidor público ejemplar». «Es un día muy triste para los extremeños y la familia progresista, pero también para mostrar gratitud», ha señalado. También han asistido al funeral otras personalidades políticas como Eduardo Medina, el expresidente andaluz Manuel Chaves o el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán.