Si usted ha sentido que al mercar y pagar la compra, el café de góndola, es decir, el que consumen los colombianos está más caro de lo habitual, no es un sentimiento, sino una realidad.Sin embargo, esto tiene una explicación. A pesar de que Colombia es un país cafetero, el consumo per cápita del grano apenas llega a los 2,8 kilogramos y aunque la Federación Nacional de Cafeteros ha hecho el esfuerzo de que este suba, el ciudadano de a pie continúa consumiendo el café “normal”, el de mezcla.Esto explica, por un lado, que el precio del grano en el país esté incrementando, por cuenta del aumento de los costos de importación del café de Brasil, Vietnam y Perú.Vea más: Nueva tensión Petro-Trump revive temores para el país: estas son las razonesDe acuerdo con los expertos, todo da sentido a la subida del precio del café. Según Andrés Valencia, exministro de Agricultura, el valor interno esta aumentando, al igual que la inflación del grano. Además, el precio internacional en bolsa, también está al alza, porque a lo que se cotice en Nueva York, es lo que marca la pauta del valor general del café en Colombia.“La pasilla sube de precio, pero debería empezar a bajar por el dólar. Todos los cafés están tasados a precios internacionales. Eso puede revertirse porque la producción puede estar mejor. Pero en el largo plazo está bajando y en el corto sube por una coyuntura de inventarios en Europa. Lo que pasa afuera, pasa dentro Colombia”, dijo.Vea más: Colombia conquista el mercado laboral de Estados Unidos: un fenómeno en plena expansiónCon base en información de Sicex con análisis de Analdex, las importaciones de enero a junio, fueron por US$158,5 millones, creciendo 78,9% frente al primer semestre de 2024.En ese sentido, por país se lee que en el caso de Brasil las compras externas de Colombia de café subieron 67,5%, al igual que de Perú aumentaron 67,6%. Pero el caso de Vietnam es el que más sorprende. En el primer semestre del año, las compras tuvieron un crecimiento del 2.000%.Taza de caféNathan Dumlao - UnsplashEl presidente de Asoexport, Gustavo Gómez, advirtió que el sector cafetero colombiano atraviesa un momento de alta presión debido al incremento sostenido del contrato C, referencia internacional para el comercio del grano. Según explicó, “si se compara el valor del contrato C, el de Nueva York, con el mismo valor hace tres años, estamos ahorita al triple de lo que costaba antes”.Gómez precisó que este fenómeno no responde a la inflación, sino a un aumento real en los costos de las materias primas. “Lo que se ha estado viendo es que poco a poco todas las marcas han venido incrementando el precio de venta, tratando de igualar lo que le ha subido el costo de adquisición de materia prima”, señaló.Vea más: Amazon pagará 2.500 millones de dólares a regulador de EE. UU. por suscripción PrimeAdicionalmente, el dirigente gremial recordó que, mientras hace unos años la carga de café rondaba entre $1,2 y $1,3 millones, hoy se sitúa en $3 millones. En este contexto, Gómez advirtió que la industria no puede trasladar de manera inmediata estos costos al consumidor final. “Va a subir, pero tiene que tener cuidado de no hacerlo tan rápido porque se pierde el cliente colombiano”, subrayó.Por ello, también planteó que el ajuste en los precios debe realizarse de manera gradual para garantizar la sostenibilidad del mercado interno y mantener la fidelidad de los compradores del país.DIANA K. RODRÍGUEZPeriodista de Portafolio