Juana de Dios Lacoste 14, la vivienda 'okupada' que ha vuelto a salir ardiendo este lunes sobre las 16 horas de la tarde, era un punto habitual de trapicheo con drogas en el casco histórico de Jerez. Vecinos de la zona consultados afirman que "no era raro" ver cómo vendían desde la ventana o ver a sus habitantes manipulando sustancias en el propio zaguán de acceso a la vivienda.Los bomberos, sofocando el incendio desde afuera. MANU GARCÍASe desconocen por ahora las causas de los dos incendios –el otro comenzó el sábado sobre las nueve de la noche y el humo era visible en todo el centro de Jerez–, aunque un vecino señaló a lavozdelsur.es que hace escasamente unos días alguien volcó un cubo de "pintura oscura, podría ser negra o marrón" contra una de las paredes de la casa. Este vecino, que vive muy cerca pero no en la misma calle, estima que debe ser un problema "entre ellos" –con ese término se refiere a los okupas– y no de ellos con los vecinos, por lo general, además, gente de edad avanzada.Juana de Dios Lacoste 14 es una casa que se quedó deshabitada hace unos años, entre otras razones al parecer por un problema de herencia, momento que fue aprovechado para la okupación. "Lo que ha ocurrido es algo habitual cuando se dan este tipo de cosas. Primero entra un grupo que establece incluso cierto contacto con los vecinos, pero luego se va produciendo una rotación de okupas que lo que consigue es que se vaya deteriorando todo: la vivienda, las relaciones con los vecinos e incluso la convivencia interna", afirma el propio vecino, residente de siempre del casco histórico y que ha visto varias veces situaciones similares.Este no es el principal punto de venta de drogas de la zona, es otro que está a menos de doscientos metros y que funciona desde hace años.El pequeño autobomba tuvo que ir a repostar. MANU GARCÍASea por casualidad o tenga que ver con las actividades que se llevaban a cabo en la vivienda, en la atención del incendio del sábado por la noche llamaba poderosamente la atención el importante despliegue de Polícía Nacional. En un momento determinado este cronista llegó a contabilizar ocho agentes del cuerpo, mientras que solo vio dos motoristas de la Policía Local cortando una de las callejuelas de acceso a Juana de Dios Lacoste.Tras los dos incendios, que hay que recordar que se han producido en menos de 48 horas, cabe esperar una evalución de Bomberos sobre cómo ha quedado la vivienda y si hay riesgo de que sea produzca algún derrumbe parcial, sobre todo a la vista de que octubre suele ser uno de los meses más lluviosos del año.