El hallazgo de un enorme cilindro metálico en un campo de Puerto Tirol generó desconcierto e hipótesis sobre su origen. Con medidas de 1,70 metros de largo por 1,20 de diámetro, los peritos sospechan que se trata de basura espacial. Un número de serie grabado podría confirmar que pertenece a un cohete de SpaceX.