Diego (35) usa su cuerpo como soporte artístico y por ese motivo tiene el cuerpo lleno de tatuajes. Tiene grabados en su piel muchos nombres, una lista de usuarios de Instagram y hasta el icono de TikTok en la cara en representación de la cultura digital. «Me dedico al arte contemporáneo, soy 'performer'. Invito al público a intervenir mi cuerpo, lo utilizo como una especie de archivo vivo», explicó este gestor cultural y artista murciano a una alucinada Laura Boado . «Se puede decir que eres un lienzo ¡Qué fuerte!», expresaba la camarera. El soltero buscó en 'First Dates' a «alguien que sea bastante afín a mi y a mi universo». Y por si lo encontraba, se personó en el restante con su máquina de tatuar, dispuesto a dejar que su cita dejara huella en su piel. La pretendienta de Diego era Victoria (32), una astróloga y terapéutica holistica natural de León que, a diferencia de él, solo tiene un tatuaje, dado que son para siempre y le da muchas vueltas. De ahí que se quedara un poco a cuadros ante el aspecto de su cita, tal y compartió en privado con el equipo del programa. «Lo del logo de TikTok… Cuando me lo ha explicado he empezado a comprender que es una persona que sacrifica su cuerpo por el arte pero de una forma que todavía estoy analizando. Estoy tratando de decir ¿esto es posible? ¿Qué está pasando?». A primera vista no hubo flechazo, ni saltaron chispas entre Diego y Victoria . Tampoco cerraron la puerta a que se acabaran gustando, quedando a la expectativa de lo que ocurriera durante la velada. Y eso fue exactamente lo que sucedió. A mitad de la cita, el murciano acababa reconocieren en los totales que aunque en un principio pensó que no había mucha química, conforme hablaron se fue «poniendo tonto». Fueron acercando posturas gracias a la astrología, el tarot y otras disciplinas holísticas. También le atrajo de ella que fuese bastante abierta de mente en cuanto a relaciones. Mientras tanto, Victoria estaba sintiendo algo bastante diferente por su acompañante. Reveló que sí tendría una segunda cita con él porque le interesaba como persona, pero no como pareja. Por ese motivo, al jugar al 'Rasca del amor', le respondió de forma cortante. «Yo creo que quería hablar más de sexo, pero yo pasando. No he sentido atracción sexual», explicaba frente a las cámaras. Victoria prefirió seguir conociendo más de la faceta artística de Diego . «Lo de tatuarse la cara ya me parece algo muy fuerte. Yo ya lo veo como un experimento sociológico», comentaba fascinada. La soltera verbalizó su deseo de ver una de las 'performances' del murciano, pero él la sorprendió con una inesperada propuesta. «Me tatúas tú», le propuso sin pensarlo. Pese al shock inicial, a Victoria rápidamente se le ocurrió una idea que Diego también vio clara. Le grabaría en la piel el símbolo de Venus, la diosa del amor. Así fue como la intimidad del reservado fue testigo de una actividad nunca vista en 'First Dates '. Victoria aceptaba el reto y la responsabilidad de hacerle un tatuaje a su cita. «Qué fuerte, madre mía. Siempre quise tatuar… La madre que nos trajo, es muy fuerte», manifestó entre la excitación y el nerviosismo. Los dos quedaron contentos con el resultado de la obra. Sin embargo, Victoria rechazaba seguir conociéndolo como pareja. No notó que tuvieran energías compatibles.